El jefe de Gabinete argentino, Aníbal Fernández, ha defendido que el fiscal Germán Moldes «debería apartarse» del caso del presunto encubrimiento del Ejecutivo de los responsables del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994 al tener «una enemistad manifiesta con el Gobierno».
«Hay una enemistad manifiesta de Moldes contra el Gobierno. Este funcionario judicial lo dejó en claro en cada una de sus intervenciones públicas. Es un hecho objetivo», ha afirmado Fernández en unas declaraciones recogidas por la agencia de noticias Telam.
Las declaraciones del jefe de Gabinete se enmarcan en la petición del diputado oficialista Andrés Larroque para recusar al fiscal Moldes. «Larroque hace bien», ha afirmado Fernández, precisando que «Moldes es una persona con una posición y eso lo vuelve parcial».
Manifestación del 18-F
En este sentido, Fernández ha criticado la presencia del fiscal y su papel como organizador de la manifestación del pasado 18 de febrero para recordar al fallecido fiscal Alberto Nisman, que según ha afirmado tuvo carácter «opositor» y no se limitó a homenajear a la figura del fiscal.
«Los que homenajearon al fiscal Nisman en esa marcha fueron seguramente sus familiares. A otros, en cambio, se los veía de jarana, como si tuvieran otras motivaciones. Eso es lo que se vio en los videos que se transmitieron después de la convocatoria», ha criticado Fernández.
«Búsqueda de la verdad»
Respecto a las investigaciones por la muerte de Nisman, quien acusó a la mandataria y a otros miembros de su Gobierno de encubrir presuntamente a los acusados iraníes del atentado contra la AMIA en 1994 en el que murieron 85 personas, Fernández ha afirmado que el Ejecutivo «no es parte del proceso».
«El Gobierno no tiene otro interés que el de la búsqueda de la verdad», ha subrayado Fernández. «Estamos sentados desde la tribuna viendo cómo evoluciona el caso. No formamos parte del proceso ni de las investigaciones. Lo único que pretendemos es que se llegue a la verdad», ha afirmado.