El expresidente de Egipto Hosni Mubarak ha solicitado este domingo a la población que respalde al actual mandatario, Abdelfatá al Sisi, asegurando que éste tendrá que adoptar «decisiones fatídicas» para el país, según ha informado el diario egipcio 'Al Ahram'.
Mubarak, que fue derrocado en febrero de 2011 tras 18 días de protestas populares contra su régimen, ha aplaudido la labor del Ejército, argumentando que las Fuerzas Armadas «comprenden la santidad del territorio nacional».
«El futuro de las naciones sólo puede lograrse a través del sacrificio, y esta generación se ha sacrificado para liberar la tierra egipcia», ha valorado, en unas declaraciones con motivo del 33º aniversario de la liberación del Sinaí.
Mubarak se encuentra ingresado en el hospital militar de Maadi, donde ha permanecido la mayoría del tiempo tras su detención después de que abandonara el poder para ser juzgado por numerosos casos de corrupción y la muerte de manifestantes durante las protestas en su contra.
Al Sisi accedió al poder tras dar un golpe de Estado en julio de 2013 y derrocar al entonces presidente electo, Mohamed Mursi, quien accedió a la Presidencia tras imponerse en los primeros comicios democráticos celebrados en la historia del país.
Desde entonces, ha lanzado numerosas campañas contra la formación islamista Hermanos Musulmanes y los grupos revolucionarios, en lo que sus críticos han descrito como un retorno al régimen de Mubarak.
Al Sisi visita España
El presidente de Egipto, Abdelfatah Al Sisi, realiza esta semana su primera visita oficial a España los días 29 y 30 de abril, en respuesta a una invitación de las autoridades españolas.
Durante su estancia en España, Al Sisi será recibido por el monarca, por el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y por el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.
Fue precisamente el jefe de la diplomacia española quien transmitió personalmente a Al Sisi esta invitación durante un viaje a Egipto a finales del año pasado.
La visita del general egipcio a España busca reforzar la cooperación bilateral en los grandes desafíos que afronta el Mediterráneo y la región de Oriente Próximo, donde Egipto juega un papel destacado, en particular en lo que se refiere a la crisis en Libia y al proceso de paz palestino israelí.
De estos retos ya tuvieron oportunidad de conversar Al Sisi y el Rey Felipe VI, con motivo de su participación en la cumbre de la Unión Africana en enero pasado.
En ese encuentro, los dos dirigentes coincidieron en la necesidad de que la comunidad internacional luche de forma conjunta frente al terrorismo, según informaron fuentes oficiales españolas. Además, el monarca le trasladó la voluntad de las empresas españolas de estar presentes en el desarrollo económico del país.
La visita de Al Sisi será el primer desplazamiento de un presidente egipcio a España desde el año 2006, cuando viajó a Sevilla Hosni Mubarak.
Al Sisi fue jefe del Estado Mayor del Ejército egipcio con el anterior presidente del país, el islamista Mohamed Mursi, contra el que organizó un golpe de Estado que logró derrocarle el 3 de julio de 2013.
El Gobierno interino que se estableció tras el derrocamiento de Mursi decretó la ilegalización de los Hermanos Musulmanes, el movimiento al que estaba vinculado Mursi, y su catalogación como grupo terrorista. Un año después, Al Sisi ganó las elecciones presidenciales y se convirtió en mandatario electo.
Desde entonces los tribunales egipcios han condenado a cientos de partidarios de Hermanos Musulmanes a la pena de muerte, muchos de ellos en juicios masivos que han sido criticados por gobiernos extranjeros y por grupos de defensa de los Derechos Humanos por entender que suponen una violación de la legislación internacional.
Hoy por hoy, Egipto –aunque ya no es un país prioritario de la cooperación española– es uno de los principales beneficiarios del Programa Masar, que se dedica a formar cuadros para modernizar las instituciones y fortalecer la sociedad civil.