En su tercer día de deliberaciones, los miembros del jurado han decidido imponer la pena capital al autor del ataque contra el maratón de Boston, descartando así la condena a cadena perpetua. De 21 años de edad y origen checheno, Tsarnaev fue condenado en abril por matar a tres personas y dejar heridas a 264 con dos artefactos explosivos que estallaron cerca de la línea de meta durante la celebración de la prueba deportiva el 15 de abril de 2013.
Tres días después, él y su hermano mayor, de 26 años de edad, mataron a un policía, robaron a punta de pistola un coche y lanzaron bombas a los agentes que les perseguían, provocando una operación de búsqueda y captura que llevó al cierre de la mayor parte de Boston.
Dzhokhar Tsarnaev tiene la nacionalidad norteamericana desde 2012, aunque nació en Kirguizistán. Su familia emigró a Rusia y luego, cuando Dzhokhar tenía ocho años de edad, a los Estados Unidos acogidos al asilo político.
AI considera que la condena a muerte contra Tsarnaev no impedirá atentados similares
La ONG Amnistía Internacional ha criticado la condena a muerte promulgada ayer por un tribunal federal contra el responsable de los atentados de Boston, Dzhokhar Tsarnaev, porque entiende que no impedirá atentados similares en un futuro.
«La pena de muerte no es justicia. Solo agravará la violencia y no impedirá que otros cometan crímenes similares. Es indignante que el Gobierno federal imponga este castigo cruel e inhumano, en particular cuando la gente de Massachusetts ha abolido esta pena en su estado», según ha lamentado el director ejecutivo de Amnistía para EEUU, Steven W. Hawkins.
La ONG recuerda que no hay ningún tipo de pruebas que respalden la teoría de que la pena de muerte es un instrumento válido para reducir el terrorismo y limitar el crimen.
«Y no hay Gobierno que pueda autoproclamarse como un líder de los derechos humanos mientras sentencia a muerte a sus propios presos», ha lamentado el director ejecutivo de la organización.