Estados Unidos ha retirado formalmente este viernes a Cuba de su lista de países patrocinadores del terrorismo, un paso significativo en el proceso de normalización de las relaciones diplomáticas entre Washington y La Habana iniciado el pasado 17 de diciembre. La decisión ayuda también a despejar el camino hacia la apertura de embajadas en ambos países -la prensa apunta que el acuerdo es inminente- y al levantamiento de las sanciones comericales a la isla.
El presidente de EEUU, Barack Obama, anunció el 14 de abril que sacaría de la lista negra del terrorismo a su antiguo adversario de la Guerra Fría, iniciando un proceso de revisión de 45 días que concluyó este viernes. El mandatario estadounidense instó al secretario de Estado, John Kerry, a iniciar una revisión de la designación de Cuba como país patrocinador del terrorismo. Kerry cumplió su cometido en vísperas de la Cumbre de las Américas, en la que isla caribeña participaba por primera vez en su historia tras el deshielo de las relaciones entre ambos países, y recomendó a Obama que sacara a la isla de esta lista argumentando que «ya no apoya al terrorismo internacional».
Así las cosas, Obama notificó al Congreso su intención de sacar a Cuba de esta lista, dando un plazo de 45 días a los legisladores para oponerse mediante un proyecto de ley. Dicho plazo ha expirado este viernes sin que el Congreso haya tomado ninguna iniciativa para frenar los planes de Obama, pese a que las dos cámaras están dominadas por los republicanos, tradicionalmente bastante reacios a cualquier acercamiento al régimen de los Castro.
La salida de la lista de países patrocinadores del terrorismo era la principal exigencia del Gobierno cubano para iniciar el restablecimiento de las relaciones diplomáticas mediante la apertura de embajadas.
Cuba forma parte de la lista negra elaborada por el Departamento de Estado desde 1982. Washington consideraba un apoyo probado a grupos armados marxistas en América Latina, proporcionando refugio en su territorio. La Habana siempre ha condenado como «injustificable» su presencia en esta lista.