El ex presidente francés Nicolas Sarkozy ha cambiado la denominación de su partido, la antigua Unión por un Movimiento Popular (UMP) que a partir de ahora pasará a llamarse Los Republicanos, un nombre que ha suscitado las críticas en el país al considerar que se atribuye, de manera exclusiva y con fines políticos, la identidad de todos los franceses que viven bajo la bandera de la república.
«Nos parece insultante e irresponsable», indica el editorial del diario 'Le Monde', «que Sarkozy finja representar a todos los republicanos como si no existiera nadie más aparte de él».
Por su parte, el ex presidente francés, que volverá a presentarse con toda seguridad a los comicios de 2017, se limitó a justificar su decisión argumentando que el nuevo nombre es «un grito de convocatoria para todos aquellos que están hartos de ver el declive diario de la república y desean impedirlo de una vez por todas».
A pesar de que una abrumadora mayoría de los miembros de su partido (un 83%) se ha mostrado a favor del cambio de nombre, cuatro de cada diez simpatizantes (así como el 70% del público en general) ha expresado su disgusto por la decisión de Sarkozy, según una encuesta de opinión en Francia recogida por la cadena británica BBC.
De hecho, un grupo de ciudadanos declarado de izquierda ha intentado que un tribunal obligue a Sarkozy a cambiar el nombre, basándose en la idea de que todos los franceses son republicanos y no solo los que votan al presidente, pero la magistratura ha rechazado la solicitud.