El presidente tunecino, Beji Caid Essebsi, ha lamentado el atentado contra el «corazón» de Túnez y ha prometido que habrá que adoptar «medidas dolorosas pero necesarias» tras el ataque contra un hotel cerca de Susa en el que han muerto al menos 28 personas, incluidos turistas extranjeros.
El jefe de Estado, que se ha desplazado a Susa, ha subrayado que el país está en guerra contra el terrorismo y que esta guerra no solo implica al Ejército y la Policía, sino a todos los ciudadanos, informa el portal Business News.
Esebsi ha reconocido que el de hoy ha sido un golpe duro para Túnez, que el pasado marzo sufrió un atentado contra el Museo del Bardo que dejó más de 20 fallecidos. Así las cosas, ha prometido que el Gobierno adoptará todas las medidas necesarias y asumirá sus responsabilidades. «Adoptaremos medidas dolorosas pero que ahora son necesarias», ha señalado.
«Nos hemos retrasado en adoptar estas disposiciones para evitar ciertas situaciones pero no lo haremos ahora», ha añadido. En este sentido, ha dicho que las autoridades competentes se reunirán desde esta noche para adoptar las decisiones que hacen falta.
En concreto, ha pedido al primer ministro que revise las autorizaciones concedidas a ciertos partidos. «La bandera de Túnez, la bandera roja, será de ahora en adelante la única bandera que se ice en Túnez, nuestra bandera no es negra», ha aseverado, en referencia a la bandera empleada por el grupo terrorista Estado Islámico.
El presidente ha visitado a los turistas que permanecen en el hotel Imperial Marhaba tras el atentado y también ha visitado a los heridos que han sido trasladados al hospital Sahlul de la ciudad de Susa.