El ataque terrorista perpetrado este viernes contra una fábrica de gas en la localidad de Saint-Quentin-Fallavier, en el departamento de Isère (sureste de Francia), tenía como objetivo volar el edificio. El presidente galo, François Hollande, al que el atentado yihadista le ha pillado en Bruselas en la cumbre europea, ha asegurado en una comparecencia de prensa que los «atacantes pretendían volar el edificio sin duda». El propio Hollande ha confirmado que el ataque tiene «naturaleza terrorista» y que fue cometido por al menos un individuo -que está detenido e identificado- y, «quizá», dos.
Una persona ha muerto y dos han resultado heridas, después de que al menos dos presuntos terroristas islamistas irrumpieran en la empresa gasística e hicieran explotar varias bombonas de gas. Las primeras informaciones policiales apuntan a que los dos individuos llegaron en coche a la factoría, donde se almacenan ingentes cantidades de gas, y justo antes de entrar en el centro industrial uno de ellos decapitó con un cuchillo a una persona en las proximidades de la entrada. Según informa la agencia AFP, el cuerpo decapitado de la víctima fue hallada clavada en la verja de la factoría y mostraba asimismo inscripciones en árabe. La Fiscalía francesa ha descartado que el cadáver decapitado, aún sin identificar, corresponda a alguno de los trabajadores de la fábrica asaltada, según ha informado el periódico Le Monde.
Uno de los presuntos atacantes habría dicho pertenecer al grupo terrorista Estado Islámico y portaba banderas islamistas, según el diario galo Dauphiné Libéré. Las fuerzas de seguridad galas han detenido a una persona por su presunta responsabilidad en el ataque. El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, que se ha desplazado al lugar del ataque, ha confirmado en declaraciones a los medios que la persona detenida, Yassin Sahli, de 34 años, inicialmente estuvo fichada por posible «radicalización» hasta el año 2008 y vive en Saint-Priest, cerca de Lyon. También ha asegurado que el individuo llevaba una bandera con inscripciones en árabe, pero que aún no ha sido traducido.
Por su parte, las fuerzas de seguridad galas han detenido a varios «posibles cómplices» de la persona que ha sido arrestada por su supuesta responsabilidad en el atentado contra la fábrica de gas. Fuentes policiales han asegurado asimismo que no se puede garantizar que no haya más atentados, por lo que un fuerte dispositivo policial ha sido desplegado cerca del atentado en busca de cómplices. Asimismo, el primer ministro, Manuel Valls, ha ordenado reforzar la vigilancia en los lugares más sensibles de la región.
El presidente, François Hollande ha decidido abandonar Bruselas, donde este viernes se celebra un Consejo Europeo, para presidir el Consejo de Defensa a partir de las 15:30 horas . Además, ha confirmado que se trata de un atentado terrorista y que la intención era volar el edificio.
Rajoy condena el ataque
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha condenado «firmemente» el atentado terrorista perpetrado contra la empresa de químicos de Saint-Quentin-Fallavier). «Condeno firmemente el atentado cometido en Lyon. La barbarie tendrá siempre enfrente a la unión de los demócratas. #España con #Francia», ha escrito Rajoy en su cuenta en la red social Twitter.