El presidente francés, François Hollande, ha condenado este lunes el incendio de una mezquita en la localidad francesa de Auch, departamento de Gers (suroeste) perpetrado en la noche del sábado al domingo. Hollande ha confirmado además el «carácter criminal» del suceso.
«El presidente de la República condena enérgicamente este acto que atenta contra los valores de nuestra República y contra el respeto a las creencias», ha afirmado Hollande en un comunicado oficial del Elíseo.
El mandatario francés ha asegurado que «se está haciendo todo lo posible para serán identificados y castigados» y ha defendido además que «los musulmanes de Francia deben poder ejercer su culto con total libertad y seguridad».
El edificio ha quedado destruido al 70 por ciento tras detectarse el fuego en torno a las 3.30 horas de la madrugada del domingo, según informa el periódico francés 'Sud Ouest'. Unas 250 personas asistieron a los rezos del viernes en esta mezquita y ya fue atacada hace unos meses por unos desconocidos trozos de tocino –prohibido por el Islam– contra la puerta del templo.