China ha exhibido este jueves su poderío militar en el desfile para conmemorar el 70 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial mostrando al mundo su armamento y reivindicando su carácter de potencia en un momento en que su crecimiento económico se está poniendo en tela de juicio.
El presidente chino, Xi Jinping, ha pasado revista a las fuerzas armadas del país por primera vez en la plaza de Tiananmen. A bordo de una limusina negra descapotable de fabricación nacional, Xi, que es también presidente de la Comisión Militar Central, ha recorrido la avenida Changan, donde ha pasado revista a once formaciones a pie y 27 de armamento.
El mandatario ha saludado a los militares y les ha dado las «gracias por su trabajo duro!». A lo que los soldados han respondido, según informa la agencia estatal Xinhua, saludando al presidente y coreando «¡servimos al pueblo!». «¡Seguir el mandato del Partido! ¡Capaces de ganar! ¡Actuar con una conducta ejemplar!», han exclamado igualmente.
En el desfile han participado 12.000 soldados y se han exhibido, entre otras cosas, siete tipos de misiles convencionales y nucleares de fabricación propia. Por primera vez, según Xinhua, las formaciones de armamento se dispusieron en base a sus roles de combate actuales. En desfiles anteriores las formaciones de armamento se distinguían únicamente como formaciones de armamento de tierra y escalones aéreos.
Así, las formaciones de tierra incluyeron módulos para el combate terrestre, defensa aérea y defensa contra misiles, ataques marítimos, ataques estratégicos, apoyo a las comunicaciones y apoyo logístico y de armamento. Mientras, en la parte de los ataques estratégicos, se han exhibido misiles de largo alcance, medio alcance y corto alcance, así como misiles convencionales y nucleares.
Nuevos cazas y bombarderos
Asimismo, la celebración de este jueves ha contado con el mayor despliegue de fuerzas aéreas durante un desfile militar en China hasta la fecha. Además de la exhibición de los aviones de acrobacias, que han dejado estelas de colores sobre el cielo de Pekín, se ha mostrado por primera vez en público los nuevos cazas J-15, apodados como «Tiburón volador».
En concreto, cinco de estos aviones han sobrevolado la plaza de Tiananmen, después de que llevaran a cabo con éxito las pruebas de despegue y aterrizaje a bordo del portaaviones 'Lianing' en noviembre de 2012.
Igualmente, el desfile ha sido la primera ocasión en la que se ha podido ver los nuevos bombarderos H-6K de medio-largo alcance desarrollados por China.