El presidente palestino, Mahmud Abbas, va a intentar ganar apoyos a nivel internacional para que Israel permita a los refugiados palestinos desplazados en Siria que puedan ser acogidos en Cisjordania, según recogen los medios palestinos.
En concreto, Abbas ha ordenado al embajador palestino ante la ONU, Riad Mansur, que trabaje con la ONU para «que se tomen las medidas necesarias y apropiadas». Con ello se cumpliría un objetivo humanitario, pero también se satisfaría el derecho de los refugiados palestinos al retorno, ha explicado Abbas. La iniciativa se centraría especialmente en la UE para que Bruselas presione al Gobierno israelí.
Según el grupo palestino Badil, en abril habían huido de Siria unos 80.000 refugiados palestinos, otros 280.000 son desplazados internos y el 95 por ciento de ellos necesitan ayuda humanitaria urgente. Hasta 884 palestinos de Siria han logrado entrar en la Franja de Gaza entre febrero de 2011 y octubre de 2014.
Unos 800.000 palestinos huyeron del actual territorio de Israel en la guerra de 1948 y sus descendientes suman a día de hoy unos 5 millones en Siria, Irak, Líbano o Jordania sin que Israel acepte su derecho de retorno.