El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha rechazado la posibilidad de que su país acoja a refugiados de la guerra de Siria y ha argumentado que Israel es «muy pequeño» y que tiene que defenderse del «terrorismo».
«Israel no es indiferente a la tragedia humana de los refugiados de Siria y África (…) Pero Israel es un país pequeño, muy pequeño. No tenemos profundidad demográfica ni geográfica y por eso tenemos que controlar nuestras fronteras contra las infiltraciones ilegales y contra los terroristas», ha afirmado Netanyahu durante el Consejo de Ministros de este domingo, según recoge el diario 'The Jerusalem Post'.
Netanyahu ha recordado que Israel ha prestado atención médica a aproximadamente un millar de heridos procedentes de Siria, a los que ha ayudado a «reconstruir sus vidas».
El primer ministro israelí ha explicado que la frontera israelí con la región egipcia del Sinaí ha sido ya reforzada con una valla y ha destacado que este mismo domingo ha comenzado la construcción de otra valla en la frontera con Jordania. «Vamos a rodear Israel con una valla en la medida de lo posible», ha asegurado. «No vamos a permitir que Israel se vea inundado con infiltrados, trabajadores inmigrantes ni terroristas», ha apostillado.
Netanyahu responde así al líder de la oposición israelí, el laborista Isaac Herzog, quien el sábado pedía al Gobierno que autorice la entrada de refugiados sirios porque «los judíos no pueden ver con indiferencia cómo cientos de miles de refugiados buscan un lugar seguro».
También el presidente palestino, Mahmud Abbas, ha defendido que se permita la entrada de refugiados palestinos afincados en Siria que quieran vivir en Cisjordania. Con ello se cumpliría un objetivo humanitario, pero también se satisfaría el derecho de los refugiados palestinos al retorno, ha explicado Abbas.
Según el grupo palestino Badil, en abril habían huido de Siria unos 80.000 refugiados palestinos, otros 280.000 son desplazados internos y el 95 por ciento de ellos necesitan ayuda humanitaria urgente. Hasta 884 palestinos de Siria han logrado entrar en la Franja de Gaza entre febrero de 2011 y octubre de 2014.
Unos 800.000 palestinos huyeron del actual territorio de Israel en la guerra de 1948 y sus descendientes suman a día de hoy unos 5 millones en Siria, Irak, Líbano o Jordania sin que Israel acepte su derecho de retorno.