El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha defendido este martes las condenas contra líderes opositores y ha dicho estar librando a Venezuela «de un Pinochet«, tan solo unos días después de que el dirigente del partido político Voluntad Popular, Leopoldo López, fuese condenado a cerca de catorce años de cárcel por su implicación en los hechos violentos ocurridos durante las protestas de febrero de 2014.
«Nadie nos va a chantajear. Nosotros con la justicia estamos defendiendo el derecho a la libertad, a la democracia de Venezuela, y estamos vacunando a la Patria de un Pinochet o de algunos pinochetistas. No vengan a darnos lecciones de justicia, nadie en este mundo. Así lo digo. Llámese como se llame», ha señalado el mandatario venezolano.
En este sentido, Maduro ha recordado a los 43 miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) que fallecieron en las protestas, durante las también perdieron la vida decenas de manifestantes. «Fueron asesinados por francotiradores», ha denunciado el presidente, quien ha afirmado que «siempre se impondrá la justicia en Venezuela».
«Si Venezuela tiene que enfrentarse al mundo entero y quedarse sola por defender su derecho a la paz, a la justicia y a la democracia, así lo haremos. Que lo escuchen bien por Washington», ha apostillado Maduro, en unas declaraciones que recoge el diario venezolano 'El Universal'.
De esta forma, durante su programa semanal 'Contacto con Maduro', ha criticado a aquellos que han denunciado los procesos que se han seguido contra dirigentes de la oposición, señalados por las autoridades de «participar en actos para desestabilizar al país».