El presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, ha advertido este miércoles a los líderes europeos de que aquellos países que cierran fronteras internas de la UE también están destruyendo el mercado común europeo.
«Aquellos que cierran sus fronteras permanentemente en un mercado común destruyen ese mercado común, porque el libre movimiento de bienes y servicios necesita de la libre circulación de personas», ha expresado en su discurso durante la reunión informal de jefes de Estado y de Gobierno sobre la crisis de refugiados.
Así, ha añadido que un área como Schengenm «donde los ciudadanos son parados en las fronteras, mientras que miles de camiones transportan bienes para la economía diaria pasan sin ningún control ,no sobreviviría ni un día».
En este sentido, ha señalado que cerrar las fronteras nacionales «es permisible como una medida a corto plazo en algunas circunstancias», pero «no resuelve nada».
De la misma forma, el político alemán ha criticado que el espacio Schengen fue creado sin fronteras interiores, pero dejó la gestión de las exteriores «en las manos» de los Estados miembro. «Este desequilibrio está causando ahora problemas, que están poniendo en peligro la libertad de movimiento», ha expresado.
En esta línea, Schulz ha recalcado la importancia de llegar a un acuerdo en torno a los centros de registro o hotspots para mejorar el mecanismo de registro ante las nuevas llegadas. Así, ha defendido que es necesario ponerlos en marcha de forma «urgente» en Italia y Grecia.
Además, ha indicado que es necesario que estos hotspots tengan «una identidad fuerte» a través de la coordinación de las agencias de la UE, así como que la información «sea compartida en todos los niveles necesarios» para evitar duplicidades.
Un reto «histórico»
Por otro lado, en rueda de prensa, Schulz ha asegurado que Europa se enfrenta a un «reto histórico» y que es necesario «abrir los ojos y mirar alrededor», puesto que existe «una enorme solidaridad» en toda esa gente que «ha ido a estaciones y a centros de recepción para asistir a los refugiados».
«Esta solidaridad debe animar al Consejo a encontrar una solución», ha insistido el presidente de la Eurocámara, quien ha pedido que las medidas propuestas por la Comisión Europea «sean implementadas rápidamente».
En este sentido, Schulz ha señalado que «la repuesta nacional es imposible» y ha reivindicado la necesidad de «estrategias europeas». «Vamos a empezar con respuestas europeas y luego acercarnos a nivel nacional, no al revés», ha apuntado.
«Los primeros pasos hacia una solución pasan por aceptar que los problemas globales no pueden ser resueltos con los países actuando por su cuenta. Las fuerzas centrífugas del egoísmo nacional amenazan con romper nuestra unión», ha subrayado.