El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha anunciado este viernes que planea convocar para el próximo año una cumbre internacional para reubicar a los más de cuatro millones de refugiados sirios esparcidos por el mundo.
Ban ha esbozado ante la Asamblea General de la ONU su plan para solucionar la crisis humanitaria desatada por la guerra en Siria, que incluye «la adopción de un enfoque global» para «superar los intereses a corto plazo», con lo que ha propuesto varias citas internacionales.
«El 4 de febrero en Londres habrá una conferencia sobre la crisis humanitaria en Siria. Nuestro objetivo es aumentar significativamente la financiación para los afectados en Siria y para los países vecinos», ha dicho.
«Después de eso, he pedido al Alto Comisionado para los Refugiados (ACNUR) que convoque otra conferencia en marzo para galvanizar las peticiones de reubicación y otro tipo de ayuda para la gente que desplazada como resultado del conflicto sirio», ha apuntado.
Ya en mayo -ha continuado Ban-, en la cumbre de Estambul, «Turquía dará la oportunidad de cambiar la agenda humanitaria global, abordando la financiación, incluida la del sector privado, y los desafíos» en esta materia.
En septiembre, propondrá a los 193 estados miembro de la ONU que se reúnan un día antes de que comience la sesión plenaria de la Asamblea General, que se celebra anualmente, para hablar de los grandes flujos migratorios».
El jefe de la ONU ha explicado que su 'hoja de ruta' contempla también la necesidad de «abordar las causas» de la crisis de refugiados. «Ya es hora de romper el silencio en torno a la mala gobernanza, las crecientes desigualdades y la violación de los Derechos Humanos, que son los principales factores por los que la gente abandona su casa», ha dicho.
Ban ha señalado igualmente a «la gestión de los flujos migratorios». «Las mafias deben ser llevadas ante la justicia. Debemos acabar con su demanda de servicios», ha reclamado, exigiendo para ello mejores sistemas de acogida y asilo.
El surcoreano ha incidido además en la necesidad de «proteger los Derechos Humanos» de los migrantes y refugiados, «especialmente de car a la creciente xenofobia y discriminación. «En el marco de los ataques terroristas, estoy muy preocupado por las sospechas hacia los migrantes y refugiados, sobre todo hacia los musulmanes», ha confesado, instando a «no cerrarles las puertas».