España mantiene un contingente de 21 militares en el cuartel general de la misión 'Resolute Support' de la OTAN en la capital de Afganistán, Kabul, que realizan sobre todo labores de asesoramiento al Ejército del país.
Los militares españoles han formado parte desde el año 2002 de las operaciones que la OTAN ha ido lanzando en Afganistán para mantener la estabilidad tras la caída del régimen de los talibán y asesorar a las fuerzas afganas a hacerse cargo de su propia seguridad.
Esta ha sido una de las misiones internacionales que más recursos ha requerido para las Fuerzas Armadas españolas (ha llegado a tener hasta 1.500 efectivos desplegados simultáneamente) y la que más bajas ha generado: un total de 100 militares han perdido la vida en combates y atentados a lo largo de 13 años de misión.
La mayoría de los efectivos españoles han estado desplegados en las provincias de Herat y Badghis. En esta última, los militares asumieron durante varios años el control de la base de Qala i Naw, que fue entregada en septiembre de 2013 a las fuerzas de seguridad afganas.
Desde entonces, el repliegue de Afganistán ha sido progresivo hasta que a finales del pasado mes de octubre el contingente español en Herat se retiró definitivamente. De este modo, desde noviembre sólo queda una veintena de militares en Kabul, todos ellos en el cuartel general de la misión de la OTAN.
La Embajada en Afganistán, como todas las que están ubicadas en países de alto riesgo como este, están protegidas con personal de la Guardia Civil o la Policía Nacional y también del Grupo Especial de Operaciones (GEO).