El ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius, ha anunciado la aprobación en sesión plenaria del texto final del acuerdo contra el cambio climático. El anuncio de Fabius ha sido recibido con vítores y aplausos por los participantes. Algunos asistentes, visiblemente emocionados, se han fundido en abrazos.
El texto final de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU que se celebra en París planteaba un acuerdo jurídicamente vinculante, ambicioso pero realista, con objetivos revisables cada cinco años y un objetivo de limitar el calentamiento del planeta a 2 grados centígrados sin renunciar a lograr que esta cifra sea n 1,5 grados centígrados. Fabius ha calificado de «histórico» el acuerdo que ha sido votado en la tarde de este sábado por 196 países que asisten al plenario porque este es «el momento de la verdad«.
«Invito a la COP a adoptar el documento del Acuerdo de París. No veo ninguna objeción. El Acuerdo de París por el Clima queda aprobado», ha proclamado Fabius, presidente de la sesión, mientras golpeaba en la mesa con un martillo con la forma del logotipo de la COP21. «Es un martillo pequeño, pero creo que puede hacer un gran trabajo», ha comentado con otros responsables de la mesa de la sesión plenaria en medio de los aplausos.
Con este acuerdo universal, los compromisarios sellan el fin de la era de los combustibles fósiles, se comprometen a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y evitar las consecuencias más graves del cambio climático.
Reacciones
El primer ministro británico, David Cameron, ha destacado que el Acuerdo de París contra el cambio climático sirve para garantizar el futuro de «nuestros hijos y nietos». «Las conversaciones de la conferencia COP21 de París ha culminado con un acuerdo climático, con todos los países del mundo firmando que van a colaborar para parar el cambio climático», ha señalado. «En otras palabras, esta generación ha dado pasos vitales para garantizar que nuestros hijos y nietos verán que hicimos lo que debíamos para garantizar el futuro del planeta», ha añadido.
Cameron ha recordado que el acuerdo recoge sus dos principales demandas: que el calentamiento sea de menos de dos grados y que el pacto sea jurídicamente vinculante.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico en Europa (OCDE) ha manifestado su satisfacción por la aprobación del Acuerdo de París, un pacto que supone un «punto de inflexión» en la lucha contra el cambio climático.
«El Acuerdo de París es un punto de inflexión decisivo en nuestra respuesta al cambio climático. Aplaudo con fuerza este histórico compromiso y la firmeza de un acuerdo que incluye un objetivo ambicioso de limitación del incremento de la temperatura global», ha destacado la OCDE a través de un comunicado suscrito por su secretario general, Ángel Gurría. Sin embargo, la organización advierte de que este acuerdo «es solo el principio del camino». «El acuerdo es un marco para la acción y los gobiernos tienen que actuar», ha destacado.
Voces críticas
Oxfam ha denunciado que el Acuerdo de París contra el cambio climático es «insuficiente», ya que no incluye medidas para ayudar a los más pobres y vulnerables a afrontar problemas como el aumento del nivel del mar, las inundaciones o las sequías.
«Oxfam (Oxfam Intermón en España) ha comunicado hoy que el acuerdo aprobado en París constituye un hito en la lucha contra el cambio climático, pero no asegura lo necesario para evitar que el calentamiento global llegue a 3°C, ni ofrece la ayuda financiera para que las comunidades más vulnerables se puedan adaptar a unos patrones climáticos cada vez más erráticos y extremos», argumenta.
El grupo reconoce la «ambición» mostrada por los gobiernos, que sin embargo «no ha quedado reflejada en el acuerdo final». «Aunque se ha hecho la vaga promesa de adoptar una nueva meta de financiación climática, el acuerdo no compromete a los países a reducir sus emisiones con la urgencia requerida», ha afirmado José María Vera, director de Oxfam Intermón.
Por su parte, la organización ecologista WWF ha expresado su satisfacción por el Acuerdo de París, pero ha advertido de que solo prevé una reducción de las emisiones que es la mitad de la necesaria.
«El acuerdo de París entrará en vigor en el 2020, la ciencia nos dice que para alcanzar la meta global que limité el calentamiento a 1,5 °C o que no exceda los 2°C, las emisiones deben alcanzar su límite máximo antes de 2020 y después reducirse de manera drástica. Los actuales compromisos solo nos brindarán la mitad de lo que se necesita, dejando una brecha de 12-16 gigatoneladas de emisiones», argumenta WWF.
Para el grupo, el acuerdo «sienta las bases de los esfuerzos a largo plazo para luchar contra el cambio climático». «Sin embargo, se necesita aún mucho más para asegurar un camino hacia un futuro de 1,5 °C», por lo que pide que «este nuevo acuerdo debe ser continuamente fortalecido y los gobiernos necesitan regresar a sus países para actuar en todos los niveles, con el fin de cerrar la brecha de emisiones, proveer los recursos necesarios para la transición energética, y proteger a los más vulnerables».