La llegada de más de dos millones de refugiados a Turquía desde que estalló la guerra en Siria, hace casi cinco años, ha provocado que casi 70.000 bebés sirios hayan nacido fuera de su país, según un balance difundido por el Gobierno turco.
Durante un comparecencia ante una comisión parlamentaria, el viceprimer ministro turco, Yalçin Akdogan, ha repasado las cifras referentes a los refugiados, en particular los servicios de asistencia ofrecidos para más de 2,5 millones de personas registradas, según los medios locales.
Akdogan ha explicado que más de 260.000 sirios reciben asistencia de todo tipo en los 25 centros de acogida que se han habilitado en diez provincias diferentes. «Unos 2,3 millones», sin embargo, se encuentran repartidos por «diferentes ciudades» del país.
La llegada masiva de refugiados ha implicado también un nivel de atención sanitaria sin precedentes, hasta el punto que, según el Gobierno, más de 10 millones de personas han acudido a alguna consulta dentro y fuera de los campamentos. La asistencia incluye también casi 300.000 intervenciones quirúrgicas y más de 67.000 partos.
En el ámbito infantil, los servicios turcos han promovido el acceso al sistema educativo de 400.000 niños y protección o apoyo psicosocial de unos 80.000, según datos del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).