El seísmo, que habría tenido casi un minuto de duración, ha tenido su epicentro en la costa de Esmeraldas, concretamente cerca de la localidad de Muisne, en el norte de Ecuador, aunque también se llegó a notar de manera importante en la capital, Quito, y en la ciudad de Guayaquil, la segunda mayor del país. El epicentro se ha localizado a 170 kilómetros al norte-noroeste de Quito.
Correa ha firmado ya un «decreto de excepción y movilización nacional» por el que se activan líneas de crédito de contingencias con multilaterales. Además trabajan en la zona afectada rescatistas ecuatorianos y comienzan ya a llegar efectivos extranjeros.
Por otra parte, la Fiscalía de Ecuador ha publicado el primer listado de víctimas mortales del terremoto con los nombres de 118 personas, la gran mayoría, 86, pertenecientes al cantón de Manta, aunque también hay 22 víctimas mortales del cantón de Canoa y 10 más del cantón de Bahía.
En busca de supervivientes
Mientras, continúan las labores de rescate y esta madrugada han sido rescatados con vida tres supervivientes en un centro comercial derruido en el barrio de Tarqui, en Manta.
Los bomberos han logrado tras 20 horas de trabajos sacar a tres personas con vida de los escombros tras pasar 32 horas encerradas. Los supervivientes han salido por su propio pie, conscientes, ya que desde que lograron alertar de su presencia pudieron entregarles agua, víveres y oxígeno.
«Yo me quedé ciega, encerrada y solo escuchaba la voz de mi marido», ha relatado una superviviente, Carmen, en declaraciones a la cadena Teleamazonas desde Portoviejo. Finalmente pudo ser rescatada, pero otros muchos no tuvieron tanta suerte.