El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha vuelto a crear polémica a través de los mensajes que ha publicado en su cuenta de Twitter. En esta ocasión, Trump ha acusado a su predecesor Barack Obama, de haber intervenido los teléfonos de la Torre Trump a lo largo de la campaña presidencial. Ante estas acusaciones, el equipo de expresidente demócrata ha negado, a través de un comunicado, que se grabaran las conversaciones del magnate.
«¡Terrible! Acabo de descubrir que Obama tenía mi teléfono pinchado en la Torre Trump antes de la victoria. No encontró nada. ¡Esto es McCarthysmo!». Así comenzaba la nueva controversia del nuevo presidente de EEUU. A través de otro tuit, Trump ha acusado al expresidente demócrata de ser «un hombre malo (o enfermo)» y ha relacionado el supuesto espionaje de sus comunicaciones con el caso Watergate en el que estuvo implicado el entonces presidente de los Estados Unidos, Richard Nixon.
Terrible! Just found out that Obama had my «wires tapped» in Trump Tower just before the victory. Nothing found. This is McCarthyism!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 4 de marzo de 2017
«Apuesto a que un buen abogado podría hacer un gran caso de que el presidente Obama estuviera grabando mis teléfonos en octubre, justo antes de las elecciones», continúa el magnate estadounidense en otro tuit. Sin embargo, a pesar de estas amenazas y como suele ocurrir con Trump, éste no ha presentado por ahora ninguna prueba que apoye estas acusaciones.
How low has President Obama gone to tapp my phones during the very sacred election process. This is Nixon/Watergate. Bad (or sick) guy!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 4 de marzo de 2017
Pasadas varias horas, Barack Obama ha respondido a través de su portavoz, Kevin Lewis, quien afirmado en un comunicado que «ni el presidente Obama ni nadie de la Casa Blanca han ordenado nunca la vigilancia de ningún ciudadano estadounidense. Cualquier otra sugerencia es simplemente falsa». Además, Lewis ha agregado que «una regla básica del Gobierno de Obama era que ningún funcionado del Gobierno interferiría en ninguna investigación independiente del Departamento de Justicia».
Donald Trump lanzaba estos mensajes en la madrugada del sábado después de que aumentaran las críticas contra la Casa Blanca tras haber anunciado que dos miembros del equipo de Trump mantuvieron contacto con varios representantes del Gobierno ruso durante la campaña electoral. Así pues, Trump también ha aprovechado el momento para quitarle importancia a esto añadiendo que el primer encuentro con Jeff Sessions, embajador ruso, fue organizado por el equipo de Obama y que éste «visitó la Casa Blanca 22 veces, 4 de ellas en el último año».
Andrea Morea