“60 millones de niños morirán antes de cumplir cinco años entre 2017 y 2030, la mitad de ellos recién nacidos”. Así lo afirma el último informe publicado por UNICEF y la Organización Mundial de la Salud, “Niveles y Tendencias de la Mortalidad Infantil 2017” donde publica que “7.000 recién nacidos mueren diariamente”, tal y como afirma el Director Superior de Salud, Nutrición y Población del Grupo del Banco Mundial, Tim Evans.
Ni siquiera los progresos realizados durante las últimas décadas disminuyen las muertes de los recién nacidos. Las complicaciones en el parto o posparto, según el informe publicado por UNICEF y la OMS, provocan el 35% de dichos fallecimientos.
«Se pueden salvar muchas vidas si se reducen las inequidades mundiales».
En cuanto a la lista de enfermedades infecciones, lideran la neumonía y la diarrea, concretamente el 16% y 8% de muertes, respectivamente, entre los niños menores de cinco años.
Aunque desde el año 2000 “se hayan salvado las vidas de 50 millones de niños menores de cinco años”, explica el jefe de salud de UNICEF, Stefan Swartling Peterson, ven necesario hacer algo más. “Disponemos del conocimientos y las tecnologías que se necesitan, solo tenemos que llevarlos a los lugares donde más se necesitan”, afirma Swartling.
The most dangerous time for a child?
Their first month of life. Find out more → https://t.co/TSscvqjxEH#foreverychild, health pic.twitter.com/HXyEle9kFo
— UNICEF (@UNICEF) 19 de octubre de 2017
Pese a ello, desde UNICEF y la OMS ven “inaceptable” que en 2017 el embarazo y el parto “supongan una amenaza para la vida de las mujeres y sus hijos”, afirma Tim Evans. Su solución es lógica y fácil, “tener una cobertura sanitaria universal de calidad y asequible, que garantice una vida saludable y productiva para sus hijos y su familia, también a las familias marginadas”.
El informe señala que «se pueden salvar muchas vidas si se reducen las inequidades mundiales». Si todos los países alcanzaran las tasas de mortalidad que hay en los países de altos ingresos, en 2016 se podrían haber evitado el 87% de las muertes de menores de cinco años, y salvado la vida de casi 5 millones de niños.
Asia meridional (39%) y África subsahariana (38%) son las dos regiones donde más se focalizan las muertes en recién nacidos. La lista de países con mayor tasa de mortalidad de bebés está encabezada por India (24%), Pakistán (10%), Nigeria (9%), República Democrática del Congo y Etiopía, con un 4 y un 3% respectivamente.
Marta Martín Gómez