Violeta, también informó de que «tiene una profunda depresión que afecta su delicado estado de salud», «no puede conversar en estos momentos con alguien, salvo con sus médicos».
Agregó que ninguno de sus familiares está actualmente en el país, por lo que el político y empresario «básicamente depende de los amigos».
PPK, como es popularmente conocido, de 81 años, cumple desde abril pasado una orden de arresto domiciliario durante 36 meses en su residencia de San Isidro, mientras es investigado por lavado de activos por sus vínculos con la constructora brasileña Odebrecht.
Y en septiembre pasado sufrió una descompensación por lo que fue internado en la misma clínica de Lima, donde fue dado de alta después de cinco días.
Kuczynski está imputado en el caso Odebrecht por presuntas irregularidades cuando era ministro en el Gobierno del presidente Alejandro Toledo (2001-2006).
La Fiscalía investiga si ocultó pagos ilícitos de Odebrecht por intermedio de su consultora Westfield Capital, registrada en Estados Unidos, con la que facturó 782.000 dólares entre 2004 y 2007 a Odebrecht en consultorías sobre proyectos de obra pública que luego fueron adjudicados a la empresa brasileña.
Además de Kuczynski, por el caso Odebrecht también están siendo investigados los expresidentes Alejandro Toledo (2001-2006) y Ollanta Humala (2011-2016), mientras que Alan García (2006-2011) se suicidó en abril pasado cuando iba a ser arrestado.
Los sobornos de Odebrecht estuvieron acompañados en Perú de presuntos aportes irregulares de dinero a las campañas electorales de los principales candidatos a la presidencia, como la líder opositora Keiko Fujimori, quien también está en prisión preventiva desde hace un año.