Trump y Macron se reunieron hoy en la residencia del embajador de EE.UU. en Londres con motivo de la cumbre de la OTAN, después de que el presidente francés dijera que la Alianza Atlántica está en estado de “muerte cerebral”, algo que provocó una fuerte reacción por parte del político estadounidense.
Mientras Trump insistió en la necesidad de que los aliados hagan más aportes a las arcas de la OTAN, Macron fue más duro al insistir en que no se trata de hablar “solo de dinero”, sino de tener una “estrategia clara” sobre lo que debe ser la Alianza.
Sobre la sanidad pública británica
Mientras tanto, Trump insistió hoy martes en que su país no tiene “nada que hacer” con la Sanidad pública británica (NHS, en inglés), después de que la oposición laborista le pidiera garantías de que ese servicio quedará excluido de un futuro acuerdo comercial entre Londres y Washington.
Con motivo de su participación en la cumbre de la OTAN que se celebra en Londres, Trump respondió con un “no, para nada”, a la pregunta de si el NHS estará sobre la mesa en la futura negociación sobre el acuerdo comercial después del “brexit”.
“No, para nada. No tengo nada que hacer con eso. Ni siquiera lo he pensado, sinceramente. Ni siquiera sé dónde empezó ese rumor. No tenemos nada que ver con eso y no lo quisiéramos (tampoco) si se nos entregase en una bandeja de plata”, afirmó Trump al reunirse con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
El líder laborista, Jeremy Corbyn, había escrito hoy a Trump para pedirle que garantice que el NHS quedará fuera de las negociaciones sobre un posible pacto comercial entre ambos países.
La posibilidad de que las compañías de EE.UU. tuvieran acceso a sectores del NHS, como los fármacos, es uno de los temas más sensibles de la campaña para los comicios británicos del 12 de diciembre.
En unas declaraciones a los medios, Trump reconoció que no quiere implicarse en esta campaña electoral a fin de no “complicar” las cosas, si bien admitió que el primer ministro, el conservador Boris Johnson, es “muy capaz” y “hará un gran trabajo” si es elegido.
Además, dijo que “puede trabajar con cualquiera” y que es “muy fácil trabajar” con él, en clara referencia a que mantendría buenas relaciones con cualquiera que resulte vencedor en los comicios.
El presidente estadounidense se ha mostrado dispuesto a negociar con el Reino Unido un acuerdo comercial una vez que este país salga de la Unión Europea (UE), en principio el 31 de enero de 2020.
Johnson, al que las encuestas sitúan como favorito, ha dejado claro que no aceptará la privatización de la Sanidad pública británica, muy defendida por todos los partidos políticos en este país.