«Hay un miedo sobre exagerado al coronavirus», declaró el ministro de Salud argentino, Ginés González García.
El funcionario instó a «no alarmarse» ni «entrar en pánico, como un poco está pasando, pero sí tener en cuenta las medidas para evitar el contagio».
«Hay mucha gente que está asustada. Y esto es para estar preocupados pero no asustados», subrayó el ministro de Salud.
Las autoridades sanitarias reportaron este martes el primer caso confirmado de coronavirus en Argentina: un hombre de 43 años y nacionalidad argentina que arribó el domingo a Buenos Aires tras visitar el norte de Italia, el mayor centro de circulación del virus en Europa con cerca de 2.000 afectados y más de 50 muertes.
A las pocas horas de llegar, el hombre comenzó a tener síntomas más acentuados y fue el domingo por la tarde a un centro médico privado en la ciudad de Buenos Aires, donde fue aislado según el protocolo sanitario vigente.
El director de la empresa de medicina privada Swiss Medical, Gabriel Novick, informó este miércoles al canal noticioso Todo Noticias que «el paciente está en muy buen estado general, así llegó el domingo y continúa de esa forma».
El hombre fue trasladado el martes a otra clínica de este grupo médico, donde permanecía hoy internado «con todas las condiciones de aislamiento», precisó Novick.
Las autoridades sanitarias dispusieron asimismo el aislamiento de al menos seis personas que viajaron en el mismo avión proveniente de Italia en el que llegó el paciente afectado por el virus COVID-19.
También fue aislado su hermano, quien lo había ido a buscar al aeropuerto y al parecer la única persona con la que tuvo contacto tras su arribo, informó el ministro de Salud de la ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós.
El primer caso de coronavirus confirmado en Argentina acapara desde el martes la atención de los medios de comunicación y desata preocupación en la población ante posibles contagios.
«Estoy usando barbijo (tapaboca) porque escuché las medidas de seguridad que hay que tomar para venir a lugares como aeropuertos, con población de riesgo, y me llama la atención que no veo mucha gente con barbijo ni que se tomen medidas generales de precaución ni que se tomen medidas generales de precaución», declaró a Efe una mujer que fue a buscar a un familiar a la terminal aérea Ministro Pistarini, cercana a Buenos Aires.
Una pasajera que arribó este miércoles en un vuelo desde Estados Unidos también expresó su preocupación por la falta de control sanitario.
«Acá no encontré ninguna medida de seguridad respecto del coronavirus, me pareció que al menos tendrían que ver la cuestión respiratoria», sostuvo la mujer mientras tosía.
En las últimas horas se incrementó el número de pasajeros que optó por viajar o circular por los aeropuertos argentino con barbijos, así como también el consumo de alcohol en gel para higienizar las manos.
En los medios y en las redes sociales se multiplican en tanto las campañas públicas de prevención para contener posibles contagios, en consonancia con el inicio del ciclo escolar y la próxima llegada del otoño.
El jefe de Gobierno de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, destacó los esfuerzos para la «preparación y la puesta a punto del sistema de salud de cara al coronavirus».
Rodríguez Larreta reconoció durante la visita a un centro de salud en la villa de emergencia de Barrio 31 que «hay que seguir trabajando para que todo el sistema de salud esté preparado para recibir casos».
Las empresas también comenzaron a implementar diversas medidas para evitar la difusión del coronavirus, que según el caso abarcan desde la restricción de viajes hasta la aplicación de protocolos sanitarios para sus empleados que visiten países con circulación del virus COVID-19.
En el Gobierno argentino ya se analiza en tanto el impacto que podría causar el coronavirus en la recesiva economía nacional y en el comercio internacional, con un ojo puesto en la situación en China, donde se conocieron los primeros casos de COVID-19 y el número de afectados ya se acerca a los 100.000.
En Latinoamérica, hasta el momento, se han reportado casos en Chile, Ecuador, México, Brasil y República Dominicana.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que Latinoamérica debe aprovechar el hecho de que sea una de las regiones del mundo con un número muy limitado de casos de coronavirus para preparar una «estrategia de contención agresiva» que permita un control rápido si el virus se expande.
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