«Nosotros tenemos dos ‘peak’. Un ‘peak’ de gente contagiada y un segundo ‘peak’, mucho más bajito en número que el anterior, que es de gente que requiere tratamiento intensivo», dijo en una entrevista concedida el jueves por la noche a T13.
«El problema fundamental de asistencia lo vamos a tener en junio», afirmó el titular de Salud, recordando además que para esa fecha –invierno en Chile– habrá «un brote de influenza suave».
Asimismo, insistió en su teoría de que «el esfuerzo aquí no es que nadie se contagie, sino que se contagien las personas, porque la única manera de protegernos para el futuro es que la mayor cantidad de gente se contagie, pero que lo hagan de manera lenta» para no provocar el colapso del sistema sanitario.
A este respecto, el ministro chileno alertó asimismo de que, si bien hay laboratorios de todo el mundo trabajando en ello, «para que tengamos una vacuna en realidad no faltan menos de dos años», según informa el diario local ‘El Mercurio’.
Por su parte, el presidente, Sebastián Piñera, ha advertido esta semana de que «probablemente el mes de abril va a significar los mayores desafíos» para el sistema sanitario y para la sociedad chilena.
La nación suramericana ha ordenado una cuarentena total en algunas comunas del país y ha ideado un «plan de protección e impulso de la economía» por valor de 12.000 millones de dólares
Editorial Estrella