Ante la presencia del nuevo coronavirus los hospitales se encuentran en su máxima capacidad, por lo que muchas veces las personas que acuden a los nosocomios por accidentes domésticos tienen el riesgo de infectarse, fue así que un hombre prefirió que le atienda un veterinario.
Esta es la historia de Oscar, un jubilado de Bahía Blanca, Argentina, que prefirió que lo atendiera un veterinario en lugar de ir al hospital y exponerse de contraer el nuevo coronavirus.
A través de un medio local, Oscar, veterinario de profesión, jubilado hace varios, contó que mientras realizaba sus actividades tuvo un accidente que necesitaba una pronta atención. “Estaba bajando una escalera, había un gancho de alambre que uso para pintar y me enganché la oreja”, contó.
Antes de acudir al hospital pensó en el riesgo ante la presencia del coronavirus, por lo que le pidió ayuda a su colega. “Si podía, me cosía yo mismo”, dijo el hombre.
«Tenía que solucionarlo de alguna manera. Yo no podía intervenirme porque no me veo ahí y no cuento con los elementos necesarios. Además tengo un poco de miedo de ir a un hospital justamente por el coronavirus», agregó.
«La decisión fue que me atendiera un colega, que obvio al principio no quería hacerlo. Le pregunté ‘¿cuántas orejas de perro suturas por año?’, y le aclaré que yo me hacía responsable», aclaró el jubilado.
Fue así que, Oscar terminó con seis puntos de sutura luego de un accidente doméstico. Según contó, su colega usó «usó material aséptico importando, me dio seis puntos y me dejó la oreja impecable».
«Ahora estoy tomando antibióticos como prevención, porque no hay infección. Y tengo la vacuna de tétanos desde hace poco tiempo», agregó.
Ante lo ocurrido, su familia intentó que fuera a un hospital, pero el hombre terminó haciendo lo que a él mejor le parecía. “En mi familia se asustaron y me dijeron que soy un animal, pero yo creo que me hicieron una cirugía estética perfecta. Aparte el veterinario es mi amigo y no me cobra”, finalizó.
Estrella Digital