El primer ministro irlandés, Micheál Martin, ha indicado que Dublín pasará al nivel 3 del plan frente al coronavirus, lo que implica una reducción de las personas que podrán participar reuniones y la limitación de los servicios de los restaurantes a las terrazas y los envíos a domicilio.
Asimismo, se ha pedido a los residentes en el condado de Dublín que limiten sus movimientos tanto dentro como hacia el exterior del mismo y que realicen desplazamientos sólo si es imprescindible.
Por otra parte, las reuniones en el exterior serán autorizadas a grupos de 15 personas como máximo, mientras que los bares permanecerán cerrados al menos tres semanas más. Las ceremonias religiosas están prohibidas y se celebrarán únicamente de manera telemática.
El vice primer ministro, Leo Varadkar, ha resaltado que «esto está empezando a ser grave otra vez», si bien ha manifestado que el país «no está tan mal» y «hay esperanza de estar bien en comparación con muchos de los vecinos», según ha informado la cadena de televisión irlandesa RTE.
Por otra parte, ha desvelado un paquete de ayuda de 30 millones de euros para apoyar a negocios en Dublín a través de un aumento del 30 por ciento de los bonos de reactivación, así como cinco millones de euros para turismo, deporte y cultura.
Las autoridades irlandesas han confirmado este viernes 253 nuevos casos de coronavirus y tres fallecidos, lo que sitúa los totales en 32.271 y 1.792, respectivamente, desde el inicio de la pandemia
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