El jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, viajará este jueves a Bruselas para participar en las cumbres de la OTAN y la Unión Europea a las que asistirá el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y en las que reclamará que ambas fortalezcan su unidad como la mejor respuesta a Vladímir Putin.
La cumbre europea estaba prevista desde hace tiempo, pero ante la guerra en Ucrania se ha convocado para el mismo día una reunión extraordinaria de la Alianza Atlántica.
Biden participará en ella, después asistirá a una reunión del G7 y más tarde estará presente al inicio de la cumbre comunitaria.
Todo ello con el objetivo de demostrar unidad ante Putin, una unidad que el Gobierno español subraya que debe salir aún más fortalecida de las citas previstas en Bruselas.
En la primera de ellas, la de la OTAN (en la que intervendrá por videoconferencia el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski) Sánchez, según fuentes del Gobierno, hará propuestas especificas y ratificará el compromiso «inquebrantable» de España con la Alianza.
Máxime teniendo en cuenta que Madrid albergará a finales de junio la próxima cumbre ordinaria de la OTAN, en la que se aprobará un nuevo concepto estratégico de la organización.
No está previsto que haya un encuentro entre Sánchez y Biden más allá de que coincidirán en la reunión y del papel especial que juega el jefe del Gobierno como anfitrión de esa próxima cumbre.
En su intervención, el presidente del Gobierno reiterará que está dispuesto a abrir el debate en la sociedad española y con las diversas fuerzas políticas para incrementar el gasto en defensa.
La intención es ir paulatinamente hacia el 2% del PIB de gasto en Defensa, tal y como se propuso en la cumbre de la OTAN de Gales, aunque por el momento la previsión del Gobierno es llegar al 1,22 o 1,24 en el año 2024.
Al igual que piensa proponer en la cumbre de Madrid, Sánchez llamará la atención sobre la necesidad de reforzar no sólo el flanco oriental ante la amenaza de Rusia, sino también el flanco sur de la OTAN, en especial prestar atención al Sahel y donde la presencia rusa cada vez es mayor.
La apelación a fortalecer la unidad estará presente igualmente en la intervención de Sánchez en la cumbre posterior de la Unión Europea, que en su primera jornada se dedicará principalmente a analizar diversos aspectos relativos a la guerra en Ucrania.
No será hasta el día siguiente, viernes, cuando los líderes europeos abordarán la que se considera cuestión principal del Consejo, la adopción de medidas para intentar frenar el coste de la energía.
A ese debate las fuentes del Gobierno afirman que Sánchez acudirá convencido de que habrá un acuerdo que permita dar solución a los elevados precios de la electricidad y defenderá sus propuestas para ello, pero sin barajar la posibilidad de plantear un veto a las decisiones de la cumbre.