En marzo de 2016, Bruselas fue golpeada por atentados terroristas que dejaron 32 personas fallecidas y aproximadamente 300 heridos en el aeropuerto y una estación de metro de la ciudad. Desde entonces, un arduo proceso judicial ha estado en marcha para determinar la responsabilidad de los implicados.
Entre los acusados, Salah Abdeslam, vinculado a los atentados de París en 2015, figura junto a Mohamed Abrini, Osama Krayem, Ali El Haddad Asufi, Bilal El Makhoukhi y Osama Atar, este último señalado como el presunto líder de la trama, y se cree que falleció en Siria en 2017.
El clima de psicosis colectiva en Bélgica se reaviva ante otro atentado
Tras un largo juicio, el jurado ha absuelto a tres acusados por el delito de asesinato terrorista, mientras que al décimo hombre en el banquillo no se le ha imputado este delito.
Aunque el veredicto ha sido emitido, las condenas serán determinadas en septiembre. Los acusados también se enfrentan a cargos por tentativa de asesinato terrorista y participación en actividades de un grupo terrorista.
Después de seis meses de audiencias, los doce miembros del jurado se retiraron para deliberar y, tras dieciocho días aislados, alcanzaron su veredicto.
Ahora, el jurado y los tres magistrados se reunirán nuevamente para decidir las penas que enfrentarán los condenados.
El proceso ha sido complejo y ha dejado al descubierto la necesidad de hacer frente a la amenaza del terrorismo y la importancia de asegurar la justicia para las víctimas y sus familias.