Un inesperado ataque ocurrido en el Foro del Consejo Distrital de Juventud de Cali alteró el desarrollo de la presentación del Mandato Juvenil, donde varios candidatos a la alcaldía de la ciudad compartían sus propuestas. Wilson Ruiz, exministro de Justicia, denunció que, en el intento de un asistente por despojar de su arma a su escolta, Alejandro Gallego, este resultó herido. A pesar de la gravedad del suceso, la intervención inmediata evitó mayores consecuencias.
Ruiz se pronunció públicamente al respecto, desmintiendo rumores y ofreciendo claridad: «Quiero aclarar que no hubo un intento por parte de mi equipo de atentar contra el equipo de Danis Rentería. De hecho, ellos defendieron mi integridad ante el riesgo de agresión. Tres individuos se abalanzaron sobre mi escolta intentando arrebatarle su arma; uno de ellos incluso esgrimió una navaja, generando una reacción inmediata de los escoltas». Como consecuencia, uno de los miembros de seguridad de Ruiz sufrió heridas en rostro y cuerpo.
El exministro, además, expresó su preocupación por la falta de garantías en eventos de esta naturaleza y anunció que se abstendrá de participar en debates similares hasta contar con una seguridad adecuada.
Además, el exministro aseguró que pese a recibir amenazas durante esta campaña, tanto él como su familia, la UNPColombia no le ha otorgado la protección esperada como candidato a la alcaldía de Cali.
Otros candidatos presentes en el evento fueron Alejandro Éder, Miyerlandi Torres, Diana Rojas, Danis Renteria y Deninson Mendoza.
La tensión del incidente impactó no solo a los directamente involucrados. Taliana Vargas, destacada figura pública y cónyuge de Alejandro Éder, compartió un emotivo vídeo donde expresaba su temor tras los acontecimientos, declarando que cancelará su agenda social programada por razones de seguridad.
Además, los candidatos allí presentes emitieron el siguiente comunicado conjunto, además de expresar su opinión sobre el suceso a través de sus respectivas cuentas de Twitter (X):
Este incidente resalta la necesidad urgente de garantizar la seguridad en eventos públicos y debates, especialmente durante periodos electorales.