Este miércoles, se ha reportado la caída de un avión perteneciente a las Fuerzas Armadas de Rusia en la región de Bélgorod, situada cerca de la frontera ucraniana. El Ministerio de Defensa ruso ha confirmado el accidente, que involucró a un avión que transportaba más de 60 prisioneros ucranianos.
En una declaración oficial, el Gobierno ruso ha proporcionado detalles limitados sobre el suceso. Sin embargo, ha sido confirmado que a bordo del avión se encontraban 65 prisioneros, tres acompañantes y seis miembros de la tripulación, según informan agencias de noticias estatales.
Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin, ha indicado que las autoridades rusas están llevando a cabo investigaciones para determinar las causas exactas del siniestro.
Este incidente añade otra dimensión a la ya tensa situación en la región, agravada por el conflicto en curso entre Rusia y Ucrania. La caída de la aeronave en una zona tan cercana a la frontera ucraniana plantea interrogantes sobre posibles implicaciones en el conflicto.