El general Aharon Haliva, jefe de la inteligencia militar de Israel, presentó su dimisión este lunes debido a su «responsabilidad de mando» en los ataques perpetrados por el movimiento terrorista palestino el 7 de octubre, según anunció el ejército israelí.
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Por otro lado, las autoridades de Irán informaron sobre la repulsión de un presunto ataque con drones en los alrededores de la ciudad de Isfahán, donde se encuentran una base militar y una instalación nuclear de importancia estratégica. Según el brigada general Amir Mihandust, comandante del Ejército de Irán en Isfahán, las explosiones ocurridas durante la madrugada fueron causadas por disparos de los sistemas de defensa aérea contra «objetos sospechosos» identificados en el espacio aéreo de la ciudad. Los medios iraníes destacan que la situación en la ciudad es de calma.
La dimisión del general Haliva fue comunicada por el ejército israelí, indicando que se llevará a cabo una transición ordenada una vez que se nombre a su sucesor. En una carta anunciando su retiro, Haliva expresó su reconocimiento de que «la División de Inteligencia no estuvo a la altura de la tarea que se nos había confiado«, y solicitó el establecimiento de un comité de investigación estatal para esclarecer los eventos relacionados con los ataques.
Este acontecimiento marca una significativa renuncia en el ámbito militar israelí, en medio de la tensión en la región tras los recientes eventos que involucran a Israel e Irán.