El Nuevo Frente Popular de izquierdas y Juntos por la República, la alianz de centroderecha de Emmanuel Macron, han llegado a un acuerdo para frenar a la ultraderecha en la segunda vuelta de las elecciones legislativas en Francia. Más de 200 candidatos han retirado su candidatura para evitar la dispersión de voto y tener una única alternativa frente a la Agrupación Nacional.
Este martes a las 18:00 expiraba el plazo para retirar las candidaturas de cara a la segunda vuelta de las elecciones legislativas. Y así lo han hecho muchos candidatos de Juntos por la República y del Nuevo Frente Popular, porque la mayoría habían terminado en tercera posición en una circunscripción liderada por el partido ultra.
De esta manera, el acuerdo que han suscrito los dos partidos pasa por evitar la dispersión del voto para tener un único rival fuerte frente al candidato de AN en cada circunscripción. Se calcula que de todas las renuncias, 130 han sido de candidatos de la izquierda y 82 del partido de Macron. Además, de las 311 triangulares y cuadrangulares que se preveían después de los resultados del pasado domingo, ya solo quedan 109.
Con las 218 renuncias que se han terminado de formalizar hoy, solo quedan 91 competiciones con tres candidatos de las 502 circunscripciones que se decidirán en la segunda vuelta de las legislativas.
Este cordón sanitario llega después de varios días de negociaciones muy intensas y con muchas discrepancias, pero por fin hay acuerdo que podría impedir la mayoría absoluta (289 diputados) de la Agrupación Nacional a pesar de la victoria en la primera ronda.