Este jueves, las autoridades estadounidenses han detenido en Texas a Ismael «El Mayo» Zambada, líder y cofundador del Cártel de Sinaloa, quien ha sido buscado durante décadas y por cuya captura se ofrecían 15 millones de dólares (13,8 millones de euros), según informó el Departamento de Justicia. Junto a él, también fue arrestado Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán.
El operativo tuvo lugar en El Paso, Texas. Ambos hombres se enfrentan a múltiples cargos en Estados Unidos por liderar las operaciones criminales del Cártel, incluidas sus letales redes de fabricación y tráfico de fentanilo, según un comunicado oficial.
La detención se logró a través de una traición. Zambada y Guzmán López creyeron que estaban inspeccionando aeródromos clandestinos en México, pero fueron llevados a Texas, donde los esperaban agentes del FBI, reveló The Wall Street Journal.
Declaración del Fiscal General
El Departamento de Justicia emitió la siguiente declaración del Fiscal General Merrick B. Garland sobre los arrestos de los presuntos líderes del Cártel de Sinaloa, Ismael Zambada García (El Mayo) y Joaquín Guzmán López:
“El Departamento de Justicia ha detenido a otros dos presuntos líderes del Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones de narcotráfico más violentas y poderosas del mundo. Ismael Zambada García, o “El Mayo”, cofundador del Cártel, y Joaquín Guzmán López, hijo de su otro cofundador, fueron arrestados hoy en El Paso, Texas.
Ambos hombres enfrentan múltiples cargos en Estados Unidos por liderar las operaciones criminales del Cártel, incluidas sus letales redes de fabricación y tráfico de fentanilo.
El Mayo y Guzmán López se suman a una lista cada vez mayor de líderes y asociados del Cártel de Sinaloa a quienes el Departamento de Justicia está responsabilizando en Estados Unidos. Entre ellos se encuentran el otro cofundador del Cártel, Joaquín Guzmán Loera, o “El Chapo”; otro de los hijos de El Chapo y supuesto líder del Cártel, Ovidio Guzmán López; y el supuesto sicario principal del Cártel, Néstor Isidro Pérez Salas, o “El Nini”.
“El fentanilo es la amenaza de drogas más letal que nuestro país haya enfrentado jamás, y el Departamento de Justicia no descansará hasta que cada líder, miembro y asociado de los cárteles responsables de envenenar nuestras comunidades rinda cuentas”.
Joaquín «El Chapo» Guzmán fue capturado en México en enero de 2016 tras dos fugas en 2001 y 2015, y extraditado a EE.UU. en enero de 2017, donde fue condenado a cadena perpetua más 30 años adicionales en julio de 2019.
Sin colaboración de México
Tras conocerse la noticia, el Gobierno mexicano afirmó que «no participó» en el operativo. Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, declaró que recibió una llamada de la Embajada de Estados Unidos informando que Zambada y Guzmán López ya «se encontraban bajo custodia de las autoridades».
Rodríguez mencionó que Zambada, quien nunca ha sido encarcelado en sus más de cuatro décadas como narcotraficante, tiene cuatro órdenes de aprehensión en México por delincuencia organizada, delitos contra la salud y en materia de armas. Sin embargo, evitó responder si México solicitará su extradición.
Declaración de no culpabilidad
La defensa de Zambada ha comunicado a la justicia estadounidense que se declaraba no culpable de los cargos que se le imputan. No obstante, aún no se conocen con exactitud dichos cargos, ya que el escrito de acusación data de 2012 y se desconoce si existe un documento más reciente. Tanto Zambada como Guzmán López se enfrentan a cargos en Illinois, Texas, Nueva York y el Distrito de Columbia. Algunos de los delitos se remontan a dos décadas atrás.
El próximo miércoles 31 de julio está programada una audiencia de lectura de cargos para Zambada en la corte federal de El Paso. Los documentos judiciales indican que el acusado ha solicitado no comparecer en persona y ser representado por sus abogados.
La DEA también indicó que Zambada «pronto enfrentará a la justicia en un tribunal de los Estados Unidos».