El jueves, Santiago Abascal, diputado y presidente de Vox, inauguró en Buenos Aires, Argentina, el III Encuentro Regional del Foro Madrid – Río de la Plata. Un evento de dos días, ideado por el propio Abascal, que tuvo lugar en el antiguo Centro Cultural Kirchner, ahora rebautizado por el presidente argentino, Javier Milei, como Palacio Libertad.
A pocos metros de la Casa Rosada, Milei recibió a Abascal y a múltiples referentes de la derecha a nivel internacional, reuniendo cerca de 400 asistentes. Entre ellos, decenas de exiliados venezolanos y varios brasileños simpatizantes de Bolsonaro que están siendo buscados por las autoridades de Brasil debido a su supuesta participación en el intento de golpe de Estado contra el presidente Lula da Silva.
Bajo este contexto, Abascal dio inicio al evento con un discurso en el que celebró que, por primera vez, “los buenos están unidos” en defensa de “la democracia de verdad” y en contra del “neocomunismo, el kirchnerismo, el sanchismo y el crimen organizado que representa el socialismo en el mundo”.
Abascal arremete contra Sánchez
Además de enumerar al “sanchismo” en su lista de “malos”, Abascal aprovechó la oportunidad para acusar al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, de estar “hundido en la corrupción” y de promover “la importación de gente desde países que no tienen nada que ver con nuestra manera de pensar” utilizando “el dinero de los españoles”. Todo ello, asegura, con el único objetivo de “alterar el panorama electoral y político” en España.
Asimismo, el líder de VOX se fue en halagos hacia Javier Milei, subrayando que “después de un año de medidas difíciles y de prometer sangre, sudor y lágrimas, sigue recibiendo el cariño de la gente”. “Cuando venía para aquí veía una pintada desde el coche que decía: ‘Te amo Milei’. En España, Pedro Sánchez no ve pintadas de ese tipo por las calles. Y cuando viajan Lula, Petro y compañía por España se encuentran con gritos de los que han tenido que abandonar sus patrias como consecuencia del socialismo”, señaló Abascal.
“El mejor gobierno de la historia argentina”
En esta ocasión, el mandatario argentino se contuvo de mencionar a Sánchez para evitar el resurgimiento de la reciente crisis diplomática entre España y Argentina. No obstante, Milei aseguró que los argentinos son “profetas de un futuro apocalíptico que ya vivimos, pero que el resto de Occidente aún tiene por delante”, remarcando que “en los países líderes del mundo libre se vuelven cada vez más populares las ideas que hundieron a la Argentina en la miseria”. Una manera sutil de referirse a los ya mencionados “malos” a los que hacía referencia Abascal.
Asimismo, acompañado por los aplausos, Milei utilizó el espacio para ubicarse a la altura del exmandatario y actual candidato republicano a la presidencia de EE. UU., Donald Trump. “No solo estoy poniendo a la Argentina al tope mundial, siendo uno de los dos políticos más conocidos del mundo junto a Donald Trump, sino que además estoy haciendo el mejor gobierno de la historia argentina”, afirmó el líder de La Libertad Avanza.
Además de Argentina, Venezuela y Brasil fueron los dos puntos claves del discurso de Milei, quien arremetió nuevamente contra “la dictadura criminal” chavista y contra la comunidad internacional que, a su juicio, permite que Maduro siga en el poder. “La dictadura asesina de Maduro en Venezuela adelanta la Navidad para tapar el fraude electoral y ahora mete preso al que ganó las elecciones”, subrayó el mandatario argentino.
Por su parte, en relación a Brasil, Milei mostró gran indignación ante la prohibición de la red social X en el país vecino. “Todavía hay degenerados en la Argentina que tienen nostalgia por la revolución bolivariana. Miremos a Brasil, donde la justicia adicta al poder petista ahora mismo está prohibiendo X, que no es otra cosa que la arena pública, donde los ciudadanos brasileños y del mundo pueden expresar su voz y expresar su disidencia; o sea, quieren prohibir el espacio donde los ciudadanos intercambian libremente sus ideas”, afirmó el argentino.
Para cerrar, Milei optó por transmitir un mensaje de esperanza a todos los argentinos que todavía luchan contra la inflación y el superávit fiscal. “No teman”, les dijo con su característico estilo mesiánico, “nuestra fe es tan grande como el desafío que tenemos para restaurar a la Argentina como un nuevo faro del mundo. Lo único que importa son las fuerzas que vienen del cielo”, concluyó.