Desde la Asamblea General de la ONU, Pedro Sánchez ha renovado su petición de transparencia en relación con las elecciones presidenciales en Venezuela, cuyos resultados han sido objeto de denuncias por fraude. El presidente del Gobierno español, en línea con la postura de la Unión Europea, no solo ha insistido en la publicación de las actas electorales, sino que también ha condenado las detenciones y amenazas hacia líderes políticos venezolanos.
“Es imperativo el respeto de la voluntad del pueblo venezolano con un recuento de los resultados electorales en condiciones de total transparencia y verificación”, declaró Sánchez. En su intervención en Nueva York, el mandatario expresó su preocupación por la situación en Venezuela tras las elecciones del 28 de julio, subrayando el compromiso “inquebrantable” de España con la democracia y los derechos humanos.
De Venezuela a los conflictos en Ucrania y Palestina
Durante su discurso, Sánchez subrayó el papel de la Unión Europea como “ejemplo de esperanza” y alertó sobre los riesgos a los que se enfrenta la democracia, señalando el «retroceso» que podría experimentar en varios contextos.
El presidente también se refirió al aumento de conflictos a nivel global, mencionando que la implicación de más países en guerras fuera de sus fronteras refleja una «enfermedad global que corroe los cimientos del sistema multilateral». Habló primero sobre la guerra en Ucrania y luego sobre la crisis en Palestina, a la que calificó como un conflicto de “máxima gravedad”.
En relación con este último tema, Sánchez condenó «con rotundidad» la muerte de civiles inocentes, haciendo un llamamiento a la desescalada y a la búsqueda de soluciones diplomáticas. Además, destacó la urgencia de aplicar la “solución de los dos Estados” en el conflicto entre Israel y Palestina.
Frente a este “panorama convulso”, el líder español reivindicó el proyecto europeo como un “ejemplo de esperanza”, destacando los cambios radicales que ha experimentado el panorama geopolítico en Europa en las últimas décadas. Asimismo, subrayó que la democracia «libra una batalla por su supervivencia» frente a lo que describió como una «agenda de reacción global» que crece «al calor de la desconfianza y la polarización».
Defensa de las instituciones democráticas
Sánchez advirtió que la democracia se enfrenta a “gente sin escrúpulos” y, por ello, llamó a proteger las instituciones de quienes intentan debilitarlas. Según sus palabras, es fundamental “reconocer errores, trabajar por su regeneración interna, reforzar la transparencia y la rendición de cuentas”, para que los ciudadanos perciban la democracia como algo cercano y vivo.
África como prioridad
El presidente también subrayó su apoyo a la alternancia de género en la Presidencia de la Asamblea de Naciones Unidas y abogó por una mayor movilización de recursos para asistir a los más vulnerables, proponiendo sistemas tributarios «más eficaces, transparentes y justos».
En este sentido, mencionó que África es una prioridad para España, considerándola un “socio imprescindible”. Según Sánchez, «ha llegado la hora de que el continente africano ocupe el lugar que se merece», destacando la importancia de fortalecer los lazos con los países africanos para avanzar hacia un progreso inclusivo y un desarrollo conjunto.
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