Este miércoles, el Gobierno de Israel ha declarado persona ‘non grata’ al secretario general de la ONU, António Guterres, impidiéndole la entrada al país. Según informó el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Israel Katz, esta decisión responde a que Guterres no condenó de manera «inequívoca» el ataque iraní contra Israel ocurrido la noche del 1 de octubre.
Katz subrayó que Guterres no mostró suficiente firmeza ante el ataque de Hamás el pasado 7 de octubre, afirmando que el secretario general de la ONU «no merece poner un pie en Israel». Asimismo, calificó a Guterres como «un antiisraelí que apoya a terroristas, violadores y asesinos», añadiendo que su legado será «una mancha en la historia de la ONU».
El detonante que llevó a Israel a tomar esta decisión fue una declaración de Guterres, emitida tras el ataque iraní, en la que pedía un cese al fuego inmediato en la región, sin mencionar a ninguna de las partes responsables del conflicto. Para Israel, la falta de condena directa ha sido vista como una postura parcial y ofensiva.
Desde Naciones Unidas, la prohibición impuesta por Israel ha sido descrita como una «declaración política». El portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, aseguró que esta medida es «otro ataque más contra el personal de las Naciones Unidas» por parte del gobierno israelí.
Dujarric recordó que Guterres ha condenado en múltiples ocasiones los ataques de Hamás, así como la violencia sexual, subrayando que las relaciones entre la ONU e Israel continúan «a nivel operativo y en otros ámbitos».