jueves, noviembre 21, 2024
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El apoyo latino a Trump: una sorpresa que reconfiguró el mapa electoral

El apoyo a Donald Trump en los condados con más del 70% de población latina alcanzó niveles récord, consolidando la victoria republicana en zonas clave

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El respaldo de la comunidad latina fue decisivo en la victoria electoral de Donald Trump en las elecciones presidenciales celebradas el pasado martes 5 de noviembre. El candidato republicano consiguió más del 70% de los votos de origen latino en los condados con una población mayoritariamente hispana, superando a Kamala Harris en estas áreas y consolidando su apoyo en los siete estados bisagra que determinaron el resultado de la votación.

Según datos obtenidos en las encuestas a pie de urna, Trump logró reducir de forma significativa la ventaja que los demócratas mantenían entre los votantes latinos. En este sentido, la brecha que en las elecciones anteriores favoreció a Joe Biden por 33 puntos se estrechó a solo 8 puntos de diferencia a favor de Harris. Un avance bastante inesperado, dada la postura inflexible que Trump mantiene sobre la migración. “No tenemos más remedio que llevarlas a cabo”, declaró el presidente electo en referencia a su plan de deportaciones masivas tras confirmar su triunfo.

En estados como Texas, Arizona, Nuevo México y California, donde se encuentran gran parte de los 30 condados de predominancia latina, el cambio de apoyo fue notable, pues en 2020, 19 de estos condados votaron por Biden, mientras que en 2024 solo 11 respaldaron a Harris. De modo que, en la frontera sur, Trump se impuso en el 75% de los 26 condados colindantes con México, un salto del 50% respecto al apoyo que había obtenido en la elección pasada. Por ejemplo, en Nuevo México, el impacto fue muy evidente, con los latinos representando el 45% del electorado, es decir, el mayor grupo de votantes elegibles en ese estado.

Esta variación se debe en gran medida al aumento drástico de votos republicanos entre los jóvenes latinos de hasta 29 años, un rango de edad en el que Trump avanzó 35 puntos porcentuales respecto a 2020. De manera que, frente a los 41 puntos de diferencia que Biden alcanzó en 2020, Harris logró tan solo una ventaja del 6% en este segmento. No obstante, los votantes mayores de 65 años mantuvieron sus preferencias con una leve variación de un punto porcentual a favor de Trump, mostrando una tendencia a la estabilidad en sus elecciones políticas.

En términos de género, Trump también logró un avance sin precedentes entre los hombres latinos, obteniendo el 55% de sus votos, un resultado que no había alcanzado ni en las elecciones de 2016 ni en las de 2020. Mientras que las mujeres latinas continuaron mostrando un mayor respaldo a Harris, pero con una reducción considerable de la ventaja demócrata, pasando de una diferencia de 44 puntos que había aventajado a Hillary Clinton en 2016 a una diferencia de tan solo 22 puntos a favor de Harris.

Asimismo, en los siete estados clave —Carolina del Norte, Georgia, Míchigan, Pensilvania, Wisconsin, Arizona y Nevada—, el voto latino también inclinó la balanza a favor de Trump, superando sus resultados de 2020 y consolidando su fuerza en estados bisagra como Carolina del Norte y Arizona, donde los latinos constituyen el 26% de la población.

Se trata de un giro latino que, sin duda, constituye uno de los puntos fundamentales para comprender el triunfo del candidato republicano, pues los datos obtenidos reflejan la importancia de los latinos como el segundo grupo étnico con mayor representación, con un 12% detrás del 71% de los votantes blancos. Una comunidad que supera al 11% de afroamericanos y al 3% de asiáticos, con un total de 6,2 millones de latinos habilitados para votar, dado que el 19% de la población latina en el país no tiene la nacionalidad.

De modo que, a pesar del polémico discurso de Trump sobre la inmigración y su plan de deportaciones, los resultados muestran un respaldo significativo por parte de la comunidad latina, lo que refleja un ajuste de prioridades a favor de temas como la seguridad y el bienestar económico. Una sorprendente inclinación de los votantes latinos hacia Trump que desafía los estereotipos tradicionales y revela una comunidad mucho más compleja y heterogénea de lo que a menudo se supone, con una creciente relevancia en el panorama electoral de Estados Unidos.

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