La Asamblea General de la ONU ha aprobado este miércoles, en una sesión de emergencia, dos resoluciones: una de ellas sobre Palestina y la otra, referente a un alto el fuego inmediato en Gaza. Ambas han contado con el voto en contra de Estados Unidos.
En la primera de ellas (aprobada por 159 votos a favor, 9 en contra y 11 abstenciones) se exige a Israel que respete el mandato de la UNRWA, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos, a la que el régimen de Benjamín Netanyahu ha acusado en diferentes ocasiones de que «algunos de sus empleados son colaboradores de Hamás».
La segunda resolución (que recibió 158 votos a favor, 9 en contra y 13 abstenciones) «exige un alto el fuego humanitario inmediato, incondicional y permanente en Gaza, que deberán respetar todas las partes, y reitera además su exigencia de que se libere de inmediato y sin condiciones a todos los rehenes», según informan desde Naciones Unidas.
Estados Unidos vota en contra de las dos resoluciones
Las dos resoluciones aprobadas por el máximo órgano deliberativo de Naciones Unidas han contado con el rechazo de Estados Unidos (tradicional aliado de Israel) porque, según había adelantado su embajador adjunto, Robert Wood, tienen defectos en la redacción.
Wood argumentó que su redacción «presenta problemas» porque no condiciona sus propósitos a la liberación de los rehenes. No obstante, reconoció que cualquier interrupción en el trabajo de la UNRWA provocaría devastación entre los refugiados palestinos y aseguró que la lucha de Israel «es contra Hamás, no contra la UNRWA».