En un vídeo difundido a través de redes sociales, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se ha dirigido al pueblo iraní cinco días después de la caída del régimen de Bashar al-Asad en Siria.
Y lo ha hecho a modo de advertencia, relacionando directamente el «colapso, en 11 días» del régimen sirio con el «éxito» en la «lucha de Israel» contra Hamás, en Gaza, y Hezbolá, en Líbano.
«Los acontecimientos históricos que presenciamos hoy -asegura- son una reacción en cadena a los golpes contra Hamas, a la aniquilación de Hezbolá y a los golpes que hemos asestado al Eje del Terror del régimen iraní».
«Ustedes sufren bajo el dominio de un régimen que los subyuga», dice Netanyahu; pero también deja claro que ese régimen «amenaza» a Israel. «Y algún día esto cambiará e Irán será libre», asegura.
En su mensaje, también afirma que Irán gastó más de 30.000 millones de dólares (alrededor de 28.600 millones de euros) apoyando a Al-Assad en Siria, y más de 20.000 millones de dólares (algo más de 19.000 millones de euros) para apoyar a Hezbolá en Líbano.
«Deben estar furiosos -les dice a los iraníes- al imaginar las nuevas carreteras, escuelas y hospitales que podrían haberse construido con las decenas de miles de millones de dólares que sus dictadores desperdiciaron apoyando a terroristas».
Y concluye con el aviso de que Israel «quiere la paz» en Oriente Medio, «y no tengo duda alguna -sentencia- de que lograremos ese futuro juntos, mucho antes de lo que la gente piensa».