Un avión de pasajeros procedente de de Wichita (Kansas) ha colisionado con un helicóptero del Ejército de Estados Unidos a la altura del río Potomac, ubicado en Washington, y cerca del Aeropuerto Nacional de Ronald Reagan, que ha cerrado su actividad en la madrugada de este jueves tras el accidente, según anunciaron también en su cuenta de ‘X’.
El vuelo 5342 de American Airlines llevaba 64 personas a bordo y ha chocado con un helicóptero militar Black Hawk mientras se aproximaba a la pista de aterrizaje, lo que ha provocado que las dos aeronaves se estrellaran sobre el río. La policía y los servicios de emergencia trabajan ahora en la búsqueda y rescate de personas en el río.
Las cadenas de televisión nacionales CBS News y CNN han desvelado que se habrían recuperado 19 víctimas mortales y por ahora ningún superviviente. Según declaraciones a estos medios, el jefe de Bomberos y Servicios Médicos de Emergencia del Distrito de Columbia, John Donnelly ha afirmado que «es una operación muy compleja, las condiciones que existen son extremadamente duras para los socorristas. Hace frío. Están lidiando con condiciones relativamente ventosas».
Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump, lanzaba un duro mensaje a través de su perfil en la red social, Truth Social. «El avión estaba en una línea de aproximación perfecta y rutinaria al aeropuerto. El helicóptero iba directo hacia el avión durante un largo periodo de tiempo. Era una NOCHE CLARA, las luces del avión estaban encendidas, ¿por qué el helicóptero no subió o bajó, o giró? ¿Por qué la torre de control no le dijo al helicóptero lo que tenía que hacer en lugar de preguntarle si había visto el avión? Es una mala situación que parece que se debería haber evitado. ¡¡¡NO ES BUENA!!!», escribía.
La Federación de Patinaje Artístico de Estados Unidos ha confirmado que un grupo de patinadores artísticos, sus entrenadores y familiares viajaban en la aeronave siniestrada.