La Unión Europea ha anunciado la imposición de aranceles por valor de 26.000 millones de euros a productos estadounidenses a partir del 1 de abril. Esta medida responde a los graves impuestos del 25% que la Administración de Donald Trump ha aplicado desde este miércoles a las importaciones de acero y aluminio europeo.
El Ejecutivo comunitario ha lamentado la decisión de Estados Unidos, calificándola de injustificada y perjudicial para el comercio transatlántico. Según Bruselas, esta política afecta tanto a empresas como a consumidores, provocando un aumento en los precios.
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Bruselas toma represalias y reactivará medidas previas
La UE ha decidido reactivar los aranceles que aplicó en 2018 y 2020 como respuesta a anteriores conflictos comerciales con Estados Unidos. En aquella ocasión, las contramedidas fueron diseñadas para compensar daños valorados en 8.000 millones de euros en sectores clave de la producción europea.
Ahora, además de recuperar esos gravámenes, se lanzará un nuevo paquete de medidas que cubrirá más de 18.000 millones de euros en contingentes europeos. La Comisión Europea ha asegurado que estas medidas se implementarán en dos fases, con la primera comenzando el 1 de abril y la segunda entrando en vigor el 13 de abril, salvo que se logre un acuerdo negociado con Washington.
Ursula von der Leyen: «Los aranceles son impuestos que perjudican a todos»
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha expresado su rechazo a las decisiones de la Administración Trump, recordando que «los aranceles son impuestos» que terminan por afectar a toda la economía. «Perjudican a empresas, elevan los precios y generan incertidumbre», ha subrayado.
No obstante, von der Leyen ha insistido en la voluntad de la UE de «mantener el diálogo abierto» y encontrar soluciones negociadas. Sin embargo, ha sido clara: «Debemos actuar para proteger a nuestros consumidores y empresas».
Consecuencias globales y reacciones en el mercado
Los nuevos aranceles estadounidenses afectan a algunos de los principales socios comerciales de Estados Unidos. Países como Brasil, México, Corea del Sur y Vietnam verán impactadas sus exportaciones de acero, mientras que los de aluminio afectan principalmente a Emiratos Árabes Unidos, Rusia y China.
Sin embargo, el país que sufrirá el mayor golpe será Canadá, dado que es uno de los mayores exportadores de estos materiales a Estados Unidos. La decisión de Trump también ha generado inquietud en los mercados financieros, con un aumento en la volatilidad de los precios de los metales y la energía.
Trump defiende su estrategia arancelaria
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha justificado su política asegurando que su objetivo es fomentar la producción nacional y reducir el déficit comercial de Estados Unidos. Durante un encuentro con empresarios, afirmó que «los aranceles son una victoria porque generan ingresos, pero la verdadera victoria es si las empresas regresan a nuestro país».
Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump ha intensificado el uso de medidas proteccionistas como herramienta de negociación. En particular, ha señalado que los aranceles también forman parte de su estrategia para presionar a México, Canadá y China a endurecer los controles sobre la entrada de fentanilo en territorio estadounidense.
Próximos pasos: ¿hacia una nueva guerra comercial?
Con la UE y Estados Unidos en posiciones enfrentadas, los analistas advierten del riesgo de una nueva guerra comercial que podría desestabilizar aún más la economía global. Mientras Bruselas insiste en su disposición a negociar, deja claro que no dudará en tomar más represalias si Washington persiste en su política arancelaria.
En las próximas semanas, se espera que el comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, retome las conversaciones con la Administración estadounidense para evitar una escalada del conflicto. Entretanto, las empresas y consumidores europeos se preparan para afrontar un posible aumento en los precios de productos clave afectados por los aranceles.