El País y Prisa aceleran en el mercado de la convergencia. Desde que Juan Luis Cebrián anunciara hace ya más de dos años la refundación digital del diario y de la compañía no se habían dado pasos tan rápidos. La crisis sigue apretando y con una enorme deuda aún por resolver Prisa quiere convertirse en una empresa digital de información y entretenimiento. Canal+ abandona la dependencia del satélite para mudar la televisión de pago a internet, los móviles, las tabletas y las televisiones conectadas. El País avanza en la reorganización de la redacción y los contenidos con el lanzamiento de su nueva apuesta internacional, sobre todo por Latinoamérica, un mercado donde aún hace valer su apodo de diario global.
Pocos días después de lanzar su nueva oferta de sábado para atraer a las mujeres y a los anunciantes de lujo, el diario estrena una nueva sección de internacional en internet donde aprovechar su despliegue de corresponsales y una bien nutrida redacción para multiplicar los contenidos, los blogs y la información en tiempo real con su red social Eskup. Detrás del aumento de contenidos está la nueva plataforma y estructura de la información que ya estrenó en mayo pasado con el lanzamiento del área de política.
El País quiere acabar con el largo período de dominio digital de El Mundo. En Latinoamérica se concentran gran parte de sus esperanzas. Tanto de aumentar la audiencia y el tráfico de su web como de sostener los intereses de Prisa en diarios e información, libros y radios. Latinoamérica representa ya más del 20% de los ingresos de la compañía y su crecimiento ayuda a paliar la crisis en España y Portugal.
En televisión, Canal+ deja de ser una televisión de pago por satélite. La convergencia con la banda ancha es obligada, para las televisiones y para las operadoras de telecomunicaciones, que la incluyen en sus paquetes para atraer a nuevos clientes y retener a los que ya tienen. Las televisiones conectadas aumentan, uno de cada cuatro internautas ya tienen televisiones inteligentes, aunque sólo un 40% las han conectado. Para 2015 se espera que se tripliquen las conexiones a la televisión por banda ancha.
Canal+ ya está en Imagenio, la televisión por internet de Telefónica, tras el acuerdo para acabar con la guerra del fútbol. Ahora presenta con Jazztel una nueva oferta de televisión bajo demanda. El lanzamiento es una apuesta por estar en todos los dispositivos y abre la batalla de la televisión inteligente en España, a la que se irán sumando operadoras y canales.
Prisa confía en sus contenidos premium para frenar la huída de abonados y la caída de los ingresos, como intentan las grandes cadenas de pago norteamericanas con su iniciativa TV Everywhere para hacer llegar su oferta a sus clientes en iPad, Android, iPhone o televisiones conectadas.
Pero cuando la televisión se une en las mismas pantallas con otros contenidos, el viejo control sobre la audiencia y sobre los abonados en los canales de pago desaparece. La batalla no es ya entre canales, sino con cualquier contenido digital, y los clientes dejan de ser de uno sólo para compartilos con el propietario del descodificador.
Los lanzamientos digitales de El País obligarán a mover ficha a sus más directos competidores y la conversión de Canal+ en televisión conectada añade otra losa sobre la burbuja de la TDT.
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Juan Varela