Atrás quedan aquellas negativas de Zarzuela cuando ahora, hace diez años el Príncipe de Asturias le pidió matrimonio a Doña Letizia Ortiz. Una telegénica periodista que sabía cómo comerse la pantalla a bocados. Como presentadora era sencillamente arrolladora. Desde mi punto de vista, la mejor que ha habido en los últimos años.
Ha pasado una década y, aunque la negativa de Zarzuela se ha ido diluyendo ante la obviedad, lo cierto es que la opinión pública está dividida.
Estoy seguro que la Princesa de Asturias ha tirado de los pies al Príncipe para bajarle al mundo terrenal. Don Felipe hoy es un tipo campechano como el Rey, simpático, afable. Es un hombre muy hecho, desde el punto de vista intelectual. Todo ello, son actitudes del heredero de La Corona. Pero Doña Letizia ha sabido introducirle entre la ciudadanía de una manera natural, como lo es todo en la vida.
La Princesa de Asturias ha tirado de los pies al Príncipe para bajarle al mundo terrenal
Debo decir también que Don Juan Carlos está cambiando su imagen de nuevo para bien – y me alegro -. La de él y la de su entorno familiar. Ha pasado de una inactividad por sus dolencias a una actividad desenfrenada viajando por medio mundo, recuperando el tiempo perdido.
Ahora bien, tras una década nos encontramos con una Letizia con seguidores y detractores. Con una Letizia que levanta pasiones y odios. Es normal. Se trata de una mujer con personalidad e ideas muy claras; una mujer que, en ocasiones, pudiera parecer que va por libre.
Sin embargo, toda la humanidad que destila Don Felipe se contrapone con un distanciamiento de Doña Letizia que cada vez más, parece más autónoma. No es buena señal, sobre todo ahora que la situación de La Corona y de su entorno, sigue siendo tan endeble.
Toda la humanidad que destila Don Felipe se contrapone con un distanciamiento de Doña Letizia
No olvidemos que, en la actualidad el Príncipe y la Reina son los únicos que están inmaculados tras los problemas de la “Casa”. Por eso Don Felipe – que está realizando un extraordinario trabajo – anda con pies de plomo. Busca la discreción, la corrección y la cercanía. Son las consignas que tienen todos en la Casa Real incluso, Doña Letizia.
Nadie mejor que Los Príncipes sabrán evaluar los diez años de matrimonio pero no se nos puede olvidar a nadie que son una pareja de Estado, los futuros Reyes de España.
El periodismo perdió a una gran presentadora. El tiempo dirá si España ganó a una gran heredera.
Alberto Peláez