Al margen de que cada vez sean más los telespectadores sensatos que crean que en la televisión hay más «putiferio» que en la madrileña calle Montera o en el barrio barcelonés del Raval, lo que muchos no conocíamos hasta ahora era el término «puti-vestido».
La autora de esta palabra, que, incomprensiblemente, todavía no está en el diccionario de la RAE (si ya están anglicismos como copyright o jonrón, como si estuviéramos viendo todo el día partidos de béisbol, no duden que podrá estar en breve), es Karime, una de las protagonistas de 'Acapulco shore', la versión mexicana de 'Gandía shore'.
La chica en cuestión, una «chaparrita» de 21 años, 1,65 m. de estatura y 55 kg. de peso (para los más detallistas), ha salido con unas revelaciones sobre sus gustos a la hora del vestir que más de uno habrá deseado que adoptase de inmediato su pareja: «Me gusta ponerme un puti-vestido y no ponerme ropa interior».
Y ustedes me dirán que como si no lo hicieran ya la mayor parte de mozas casaderas que aparecen a diario en nuestros programas. Pues cuando uno tiene razón yo se la doy. La chica lo único que ha dicho es lo que aquí pocas confiesan y callan.
Programas como 'Mujeres y Hombres y Viceversa' o las galas y debates de 'Gran Hermano', como con anterioridad ocurría con las de otros formatos como 'Supervivientes' o incluso como de vez en cuando nos muestra 'Sálvame deluxe' (sobre todo cuando lo visitaba María Lapiedra antes de prometer no volver a enseñar sus senos en TV) están llenos de «puti-vestidos», con o sin ropa interior debajo de ellos.
Quizás el que más haya disfrutado con la confesión de la mexicana sea Fernando, uno de sus compañeros de programa, un chico muy «fino» que por un lado dice que le gustan «grandes y gruesas» y por otro que «ni por un millón de dólares me daba un cabrón«, que traducido al castellano viene a significar que no practicaría la homosexualidad ni por todo el oro del mundo.
Escuchando frases como estas uno comprende, y sobre todo agradece, que 'Gandía Shore' ya no esté en nuestras pantallas, por mucho que no le llegara ni a la suela del zapato en cuanto a traspasar límites a 'Acapulco Shore', que es lo más parecido a Sodoma y Gomorra que uno puede encontrar en estos momentos en la pequeña pantalla.
Si dentro de poco, gracias a Cuatro, vamos a poder ver a chicos y chicas intentando relacionarse completamente desnudos, que nadie ponga la mano en el fuego de que Mediaset no termina comprando el formato 'Shore' y convierte en un programa infantil o religioso su versión mexicana.
La mosca