El líder de la Oposición, Pedro Sánchez, ha asegurado este fin de semana que las recetas de Gobierno del PP están incrementando la desigualdad hasta niveles «sin precedentes». Es verdad. Del mismo modo que lo es que el Ejecutivo de Mariano Rajoy está propiciando un crecimiento económico apreciable. Por las expectativas que se tienen de índices avanzados, hay economistas que ven posible un crecimiento de hasta el 3%, lo cual situaría España como una de las economías con mayor crecimiento de la Unión Europea.
Lástima que estos resultados macroeconómicos vengan acompañados -como advierte el secretario general del PSOE- de una apertura de la brecha entre las clases sociales, de tal modo que el que más tenía más tiene y el que menos tenía menos tiene. Todo tiene su explicación. El ajuste económico español recayó sobre todo en el sector público y en el segmento de los salarios más bajos. Al no ser posible ajustar la competitividad mediante una devaluación de la moneda, se echó mano de los costes salariales. La hora trabajada es ahora mucho más barata en España y gracias a esa política económica España tiene hoy una balanza de bienes y servicios con superávit.
Ni el PP ni el PSOE parecen estar por encontrar una salida pactada con los agentes sociales
Un objetivo compartido debería ser la reducción de la desigualdad. Pero ni el Gobierno anuncia medidas concretas para reducirla ni desde la Oposición se concretan alternativas susceptibles de consenso. Es evidente que la política fiscal tiene unas excelentes posibilidades redistributivas para atenuar la brecha social pero ni el PP ni el PSOE parecen estar por encontrar una salida pactada con los agentes sociales.
Entre tanto, lo que puede considerarse la centralidad política y social del sistema corre el riesgo de perder posiciones, por falta de suficiente capacidad de reformas. Como alternativa emergente se abren paso grupos que recogen el descontento de muchos afectados por el paro y la devaluación salarial, víctimas a su vez del recorte de derechos en educación y sanidad. Las encuestas no hacen más que ponerle porcentajes a como se mueven unos y otros.
José Luis Gómez