Sólo un desnudo, como el que protagonizó Sabrina Salerno en la Nocheviaje de 1987, o mejor dos, o tres, o diez si es posible, podría salvar a José Luis Moreno de no ser lapidado públicamente. Con ellos quizás se olvidaría la afrenta, el pecado más mortal de todos los pecados mortales, que cometió el pasado sábado con 'La alfombra Roja', que nada tiene que ver con la que ponen cada año en los Oscar para rendir pleitesía a los actores de Hollywood. En este caso el color puede significar únicamente la sangre que se puede verter del popular productor por perpetrar ese espacio del «prime time» de TVE.
Mientras las redes le insultan más que a Bale, Jesé, Ancelotti y Casillas juntos (otros tienen bula papal en ese asunto), sindicatos como Comisiones Obreras piden su cabeza, considerando al espacio como «una falta de vergüenza y de respeto».
Si 'El Ministerio del Tiempo' tiene derecho a llevarnos cada lunes a una época de nuestra historia, y los jueves 'Cuéntame cómo pasó' nos retrotrae a 1983, ¿por qué el señor Moreno no puede llevarnos cada noche de los sábados a finales de los noventa y principios del 2000? La época en la que 'Noche de Fiesta' barría en audiencia en televisión con los mismos argumentos que ahora nos ha traído 'La alfombra roja'.
¿Tiene la culpa Moreno de que TVE le haya pagado unos tres millones de euros por las trece entregas para la noche sabatina? ¿Tiene la culpa Chicharito de que Florentino Pérez le haya pagado una millonada por calentar el asiento del banquillo madridista? Es el mismo caso.
El único culpable de este despropósito de volver al pasado (para lo único que no vuelven es para no emitir la serie 'La República', debe ser por si sale otro Podemos que pide la implantación de la misma y la derrocación del Rey) no es José Luis Moreno sino José Antonio Sánchez, el ilustre presidente de RTVE, o en su defecto José Ramón Díez, el actual director de TVE. ¿O es que acaso esperaban que el productor fuera a crear un nuevo 'Breaking Bad' pero en formato programa de entretenimiento?
El sindicato al menos sí comparte esa teoría de responsabilidad de Díez y ha precisado en una nota que «si el programa no se cancela entenderemos que el actual director de TVE no tenga más remedio que presentar su dimisión, un buen profesional como José Ramón Diez que se formó y que desarrolló buena parte de su trayectoria en esta casa, estamos seguros que no será cómplice de esta situación”. ¿Apuestan a que sí? ¿Apuestan a que no dimite? No lo hagan.
Moreno es Moreno ahora y ha sido Moreno siempre. Es decir, que si le contratan para un espacio de este tipo todo el mundo tiene asegurada su voz en «off», sus «matrimoniadas», sus artistas caducos de otras épocas y, por supuesto, sus desfiles de moda. Y si le pagan por eso, y muy bien por cierto, ¿por qué no lo va a hacer? Como si le pagan por mearse cada día en la puerta de Prado del Rey.
Eso sí, de ahí a ir de «sobrados» como Soraya, nuestra ínclita cantante no la líder popular, asegurando que «¡ojala hubiesen muchos J. Luis Morenos!», como escribió en su Twitter, va ya un abismo. Por ahí no paso. ¿Se imaginan que hubiera uno para cada franja horaria de todos los días de la semana? Esto no es la serie 'Con ocho basta' de Dick Van Patten. Con uno es demasiado.
La mosca