«A veces es necesario y forzoso que un hombre muera por un pueblo, pero nunca un pueblo entero debe morir por un hombre: acuérdate siempre de esto, Sefarad». Las palabras del gran poema de Salvador Espriu debieron sobrevolar la reunión del Comité Ejecutivo del PP en el que los barones asistentes escucharon en silencio y por primera vez sin aplaudir -¡todo un hito¡- un discurso complaciente de Mariano Rajoy al analizar los resultados obtenidos en las elecciones del domingo. Rajoy insiste en el análisis tecnocrático y economicista que han rechazado buena parte de los electores tradicionales del partido. No es probable que todos los barones del PP hayan leído a Salvador Espriu, pero es seguro que más de uno sí. Desde luego, lo doy por hecho entre algunos cuyas baronías pertenecen a lo que históricamente fueron territorios del Reino de Aragón. Pienso en la sobria y solvente María Fernanda Rudi, en el mallorquín José Ramón Bauzá o en el superado Alberto Fabra, el hombre al que sin ser Hércules le fue encomendada la imposible tarea de limpiar los establos valencianos del rey Augias.
Es probable que a la vista de los resultados alguno tuviera en la punta de la lengua las palabras del poema pero no se atrevió a decirlas. Curiosamente quien ha sido libre hablando de la derrota y sus causas ha sido uno que no quiso asistir a la reunión: Juan Vicente Herrera, presidente en funciones de Castilla y León. Ha tumbado el discurso complaciente frente a la derrota o sí se prefiere la pírrica victoria. Herrera que barrunta no presentarse a la investidura, ha dicho que el PP ha pecado de arrogancia; que el discurso macro de la recuperación económica no tiene en cuenta a las clases excluidas por la crisis y que la tibieza y tardanza a la hora de atajar la corrupción explica por qué muchos votantes populares no fueron a votar el domingo. Herrera dice más. Dice que sí le preguntan sí Rajoy es el mejor candidato lo que tendría que hacer el Presidente es mirarse en el espejo. Mirarse en el espejo y responder con sinceridad a la pregunta. Hacía tiempo que no se escuchaban cosas así en boca de un barón del PP. El más votado, por cierto el 24M, pese a perder la mayoría absoluta. Creo que Herrera sí ha leído a Salvador Espriu.
Fermín Bocos