En China pasó algo tan gordo en sus mercados bursátiles la semana pasada que se suspendieron las cotizaciones de muchas compañías. Las autoridades chinas inyectaron dinero y evitaron, por ahora, contagios mundiales. Ventajas de tener un gobierno comunista de ordeno y mando que practica el capitalismo. ¡Quien lo hubiera imaginado! ¿Será el objetivo de Podemos? Quizás, pero no podrá conseguirlo abandonando el euro, la Unión Europea y la OTAN. ¿Qué pensará al respecto su hermano mellizo, Ahora en Común?
Las negociaciones con Irán para que Teherán renuncie definitivamente a la bomba nuclear se prolongaron de nuevo. El éxito peligra pero aún es posible. El acuerdo exigirá, naturalmente, verificaciones estrictas e intrusivas. Irán ya engañó en el pasado a la Organización Internacional de Energía Atómica. A cambio los iraníes desean el fin de las sanciones internacionales que se retirarán gradualmente al tiempo que cabe su eventual reimposición si no cumple Irán con lo suyo. En esto los cinco Permanentes del Consejo de Seguridad (China, EEUU, Francia, Reino Unido y Rusia) más Alemania y la Unión Europea actúan juntos. ¿No podrían hacerlo asimismo en otros temas importantes para la seguridad mundial?
Prosigue la desestabilización de Ucrania a cargo de Putin que aprovecha la obsesión rusa de que perdieron la Guerra Fría a manos de Washington cuando lo que ocurrió es que se derrumbó el comunismo, lección mal aprendida por algunos en Europa. Haría mejor el nuevo Zar en pasar página y ayudar a la gobernabilidad mundial. Putin y sus fans viven aún en la lógica de la Guerra Fría. Para ellos el Acta Final de Helsinki (que cumple 40 años), firmada por Moscú y que permite a cada Estado europeo estar con quien quiere y prohíbe anexionarse territorios ajenos como Crimea, es papel mojado.
En el Oriente Medio el Califato de Al Bagdadi, con su Estado Islámico asentado en territorios conquistados en Siria e Irak y cabezas de puente en otros lugares como Yemen o Libia, se encarga de pescar en aguas revueltas por los enfrentamientos político-religiosos entre sunnís y chiís, aterrorizando con crueldad donde se asienta y más allá en nombre de Alá que seguro que no lo aprueba. Política y religión son mala compañía. En todos lados.
Libia es un caos que facilita el tráfico de seres humanos por mafias y el deterioro de beneficios logrados anteriormente. Seguro que los habrá que ahora piensan que contra Gadafi se vivía mejor aunque eso no justificaba el mantenimiento de su dictadura. Este desorden habilita también el Sahel como un vasto santuario para el tráfico de armas y drogas. Tras el final de las dictaduras las poblaciones antes subyugadas deben demostrar su capacidad democrática. No siempre ocurre. ¿La tuvieron Morsi, elegido en su día Presidente de Egipto, y sus Hermanos Musulmanes? Al Sisi pensó que no era así con apoyo entre los egipcios lo que no hace de su dictadura un autoritarismo democrático. Las primaveras árabes se marchitaron, desgraciadamente.
En Afganistán, país estratégico, comprobaremos si la retirada de las fuerzas de combate extranjeras avaladas por la ONU incita a los talibanes a volver con sus odiosas prácticas extremistas político-religiosas y terroristas. El destino afgano está en manos de sus propios ciudadanos y fuerzas de seguridad. ¿Habrá perdido allí la Comunidad Internacional tiempo, dinero y vidas? No, si se mantiene la democracia.
En la UE nos enfrentamos aún a una grave crisis económica con implicaciones político-sociales. El «austericidio» requiere suavización pero sin los ingenuos sueños de un Tsipras, jaleado deferentemente por Pablo Iglesias, ni manipulaciones torticeras. Con lo que Atenas propuso a la UE esta semana pasada, Tsipras podría haber evitado su referéndum, días de caída libre de Grecia hacia los infiernos, incertidumbres acerca del euro y variopintos embustes.
Cual mago, Tsipras agitó una oferta de rescate europea diciendo: “Nada por aquí, nada por allí, cierren los ojos y voten NO en mi referéndum”. Tras su malabarismo interno, aplaudido por los extremismos europeos de derecha e izquierda que ya se tocan en el propio gobierno griego, este mago propuso lo que antes maldecía. Hay prestidigitadores, peores, que incluso hacen desaparecer elefantes. También hay gente que comulga con ruedas de molinos. Dicen que se puede engañar a uno toda la vida y a todos una vez, pero no a todos siempre. Culebrón aun con recorrido pero con déficit de confianza en Atenas.
Vivimos peligrosamente. Ya ocurrió antes y seguirá ocurriendo. Es necesario, pues, entendernos los unos con los otros respetando las reglas democráticas y la realidad en la que dos más dos siempre son cuatro.
El Papa, encandilado siempre por la política internacional y poco reformista en casa, pidió perdón por los crímenes de la Iglesia contra los pueblos originarios durante la conquista de América. Buen ejemplo para otros conquistadores. ¿Basta? ¿Y los esclavos africanos? Por ejemplo.
Carlos Miranda
Embajador de España
Carlos Miranda