Hay que reconocer que como «jefes de personal» los dirigentes de Podemos tienen buen ojo. Incorporar a sus listas de candidatos al Congreso al ex JEMAD José Julio Rodríguez ha sido algo más que un golpe de efecto,como lo fue en su día el fichaje de Manuela Carmena o la alianza con Ada Colau.
José Julio Rodríguez es un militar prestigioso, pero además su presencia en las listas de Podemos viene a incidir en el mensaje que vienen reiterando los líderes de esta formación de que son capaces de contar con personas con distintos perfiles y de un espectro ideológico amplio.
Es evidente que Podemos esta sacudiéndose del letargo en que parecía haberse instalado quizá confiados con que no les hacía falta hacer mucho más porque el ansia de cambio en la sociedad les iba a seguir favoreciendo.
Pero en política hay que ganarse el favor de los ciudadanos todos los días. De manera que Pablo Iglesias vuelve a estar la más de activo, lo mismo que el resto de la plana mayor de Podemos.
Fuentes del entorno de Podemos dicen que puede haber más sorpresas en los fichajes, y que Pablo Iglesias se ve con gente de lo más diversa.
Las encuestas vuelven a augurar buenos resultados a Podemos, pero naturalmente todo dependerá de que no cometan errores de aquí a las elecciones.
El problema de Podemos es que desconcierta con sus alianzas y fichajes. Si por una parte se apunta tantos como es contar con José Julio Rodríguez, por otra a muchos sectores de la sociedad les chirría su acuerdo con la izquierda abertzale para formar parte de una candidatura conjunta al Senado. Demasiada ambición la de querer cubrir un espectro político demasiado amplio.
En cualquier caso el fichaje del ex JEMAD ha sido todo un golpe de efecto. En todo caso además de fichajes estrella a los ciudadanos se les convence con un programa electoral realista que contemple los problemas de la mayoría de los ciudadanos. Veremos con que nos sorprenden en el futuro inmediato.
Julia Navarro