Se ha demostrado que el 15-M ha resultado un negocio espectacular para algunos dirigentes políticos de nueva savia, que llegaron y entraron como elefantes en una cacharrería prometiendo regeneración y políticas de nuevo cuño que acabasen con el bipartidismo, a la vez que saneasen la vida política española, según ellos.
Pues bien, no se ha necesitado de mucho tiempo para que la mayoría de la ciudadanía española se diese cuenta que algunos de esos que portaban las banderas de la regeneración tejidas en círculos y asambleas populistas, anarcas y anticapitalistas, han pasado de llamar casta a los partidos convencionales a hacerse un sitio de profunda «castaza» desde que han pisado la alfombra política y desde sus escaños, y su identificación como señorías, alcaldes o parlamentarios, su dedicación ha sido la de recolocar a familiares y amiguetes con sueldos que en ocasiones superan a lo que gana el mismísimo Presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, y a especular con operaciones urbanísticas allí donde gobiernan determinados mandatarios podemitas, o por contra, cargarse proyectos que preveían aportar cientos de puestos de trabajo para beneficio de la ciudad que gobiernan. Véase Madrid o la Barcelona de Colau entre otros.
Como dice el refrán latino, para ser la mujer del César no hay sólo que serlo, sino parecerlo, y los dirigentes podemitas en cuanto han enseñado la patita donde gobiernan, han demostrado que son una verdadera catástrofe para el buen funcionamiento de la ciudad o la región que dirigen, por su desconocimiento de leyes, funcionamiento y gestión en algunos casos o porque hay una huida de los modelos empresariales de los sitios en donde se aposenta Podemos y su amalgama de siglas que son los mismos canes con distintos collares.
En España hay veces que los españoles creemos que hemos visto todo en la vida política y en las declaraciones de nuestros dirigentes, pero hay que reconocer que algunos siguen teniendo «guasa», como Pablo Iglesias, cuando se pone delante de unos micrófonos y sin ruborizarse con voz de monaguillo lanza mensajes que se mueven entre la mentira y la infantilidad diciendo por ejemplo que donde gobierna Podemos hay crecimiento económico y empresarial.
Sólo hay que preguntar a cualquier empresario de este país, quienes están rezando para que Podemos y sus acólitos no consigan alcanzar el gobierno de este país para que no ocurra como en la Grecia gobernada por los podemitas de Syriza donde los empresarios huyen, y no hay quien consiga invertir desde el exterior en ese país comunitario de la UE.
Pero si los modelos, números y las cuentas económicas y empresariales de Podemos son como las de su mecenas, el ‘narcodictador’ Maduro en Venezuela, sabemos y entendemos el pánico que surge en la población no sólo económica y empresarial española, sino europea y mundial.
Pablo Iglesias bien haría en explicar ese milagro de la multiplicación de panes en forma de dólares llegados para la financiación de su formación política desde un gobierno dictatorial venezolano que encarcela políticos, cuyos algunos de sus dirigentes gubernamentales se lucran del narcotráfico, que dejan morir a su pueblo de hambre y que gobierna sin respetar libertades ni Derechos Humanos.
Volviendo a la gestión de la «castaza» podemita, dicen algunos de los funcionarios del Ayuntamiento de Madrid que Carmena, la alcaldesa apoyada por el Partido Socialista, llora físicamente mucho en su despacho por las críticas que recibe a su persona por la gestión que lleva ella y su equipo en la capital del reino.
Pero como por sus hechos les conoceréis, mejor que llorar haría la alcaldesa demagoga podemita recapacitar en lo que en poco tiempo han significado grandes titulares en los medios de comunicación por la gestión de su equipo en la cabalgata de los Reyes Magos, o la contratación de sus compañeros de gobierno de titiriteros proetarras, placas de nombres de calles que se retiran según ellos por error, confundiendo churras con merinas, o ver a el concejal podemita Zapata después de los twits insultantes contra las victimas del terrorismo, que su segunda gran aportación es contratar a familiares suyos para enchufarlos con sueldazos en el ayuntamiento de Madrid, o ver también a la portavoz de la señora Carmena condenada por pasearse en pelotas en el oficio de una Misa y amenazar a los allí congregados…etc.
Y lo de Madrid se suma a la mayoría de lugares donde la «castaza» de los Colau, Kichis y compañía se ha aposentado y donde nos seguirán dando días de gloria..Al tiempo.
Carlos Iturgaiz